Mi puntuación: 6/10
Comedia española que se mueve cómodamente entre el humor gamberro, desatado por un magnífico Jordi Sánchez quien arranca las mayores risas, y un tono más "blandito" romántico que incluso llega a conmover sin que lo veamos venir. En cuanto a la historia, estamos ante una versión más fresca y veraniega de la francesa Dios mío, ¿pero qué te hemos hecho?, donde los problemas de sus protagonistas y las relaciones paterno-yerno-filiales son el hilo argumental que sirve a un reparto lleno de caras conocidas, y con gran química en pantalla, para divertirnos sin pretensiones con una película sencilla y apta para toda clase de público.