Separata: Las Minas de Almadén vistas por un Médico

Por Mipuebloalmaden
   Introducción El interés por ahondar en los antecedentes históricos de la minería y metalurgia del mercurio, en particular la de las Minas Almadén, ubicadas en Ciudad Real (España), han capitalizado, principalmente desde la segunda mitad del siglo XVI, la atención de ingenieros y sanitarios hacia los problemas de salud derivados del trabajo (Zarraluqui, 1983).
La nocividad del proceso de obtención del azogue y la trascendencia económica alcanzada por este metal justifican esa atención (Dobado, 1982). En este trabajo, presentamos el testimonio de uno de los observadores más cualificados de la realidad de la vida laboral de los trabajadores de las Minas de Almadén (primera productora mundial de mercurio) durante la primera mitad del siglo XX a través de la mirada del médico José Domínguez Llorena (Domínguez, 1955). Su amplia experiencia dedicada a la actividad asistencial de los mineros y operarios metalúrgicos de estas minas, prolongada durante casi veintiún años, le convierten en un profundo conocedor de los riesgos ocupacionales en estas actividades minero-metalúrgicas por exposición al riesgo mercurio.  Diversos testimonios sobre salud laboral a lo largo de la historia de Minas de Almadén  
Como señaló Sigerist (1936), los morbi metallici fueron las primeras enfermedades de carácter profesional que atrajeron la atención de los autores médicos. Prueba de ello es que, desde la segunda mitad del siglo XV, en que Ulrich Ellenbog redactó un breve escrito sobre los riesgos ocupacionales de los operarios de orfebrería de la ciudad alemana de Augsburgo hasta el siglo XVIII, los problemas de salud derivados de la obtención y manipulación de los metales capitalizaron los testimonios médicos dedicados al mundo laboral y buena parte de éstos tuvieron por objeto las enfermedades producidas por el mercurio, cuyos efectos nocivos no sólo afectaba a los mineros, operarios metalúrgicos y a aquellos que lo aplicaban en la purificación de metales preciosos, sino también a los que lo administraban o recibían con fines terapéuticos. Pero lo que es indudable es que, de todos ellos, el sector minero-metalúrgico es el que involucró a un mayor número de trabajadores y el que sometía a sus operarios a condiciones de trabajo más extremas. Conviene apuntar que el interés por la prevención de estas enfermedades mercuriales, no solo se centró en médicos, sino también en los propios ingenieros responsables de los sistemas de producción mineros y metalúrgicos. Prueba de ello, han sido las magníficas colaboraciones que al respecto se han dado entre los equipos de ingenieros y el personal sanitario de las Minas de Almadén a lo largo de su historia.   PINCHA AQUÍ para leer el artículo completo.  Créditos:  José Tejero Manzanares1 & Francisco de Paula Montes Tubío2Lugar del Estudio: Fundación Almadén "Francisco Javier de Villegas", 13.400, Almadén (Ciudad Real)-España 1 Universidad de Castilla-La Mancha. España jose.tejero@uclm.es2 Universidad de Córdoba. España ir1motuf@uco.es