- La séptima serie de variaciones tiene como tema la justicia, pero también lo puede ser el derecho y el estado. Sin embargo, lo que caracteriza de especial manera es la tríada que la estructura que pertenece a la lógica. Los principios de identidad, contradicción y tercio excluso. La diferencia en el tratamiento radica en la consistencia de los modelos que idealizan, mientras que en la logica formal se ha demostrado que no hay modelo que satisfagan a determinados sistemas, la lógica material, en cambio, lo que reclama es un sistema que exprese un contenido que es consistente, como lo es cualquier curso de acción (según la denominación de Wittgenstein).
- La cuestión de la justicia es encontrar un modelo en la que identifiquemos acciones justas, un esquema de concordia que las posibilite que es como garantizar los juicios justos en el futuro. Pero esto es lo es imposible hacerse una imagen, es posible identificar acciones justas, describir un esquema de concordia presente, aunque histórico, y que además permita juicios justos en el futuro pero sólo es posible pensarlo como ejercicio y no como imagen. El texto que propusimos como motivo en una entrada anterior apunta a este hecho de que los principios son antes pruebas que axiomas, y lo más trágico es lo son también para la praxis.
- La aporía propuesta para esta serie de variaciones no tiene dos polos sino tres y tiene a Aristóteles como referente. Los tres términos de la aporía son principio, causa y condición. Los dos primeros los usa Aristóteles, pero el tercero puede dwducirse del uso que hace Aristóteles del segundo para plantear con mayor profundidad el primero. La teoría de las causas desarrolla la dimensión gnoseológica de los principios de los presocráticos, pero la diferenciación de cuatro raíces anticipa el tratamiento matemático, lingüístico de la realidad. Entonces ya no hablamos de causas sino de condición. Ahora bien, la aporía está en que es el problema que tratemos para saber si estamos hablando de principio, causa o condición.