Ser padres no es fácil, no dejes que eso te hunda

Por Hijosmanual @hijosmanualdee1

Esta semana la he empezado con mal pie. Alguien ha conseguido que al menos durante unas horas me sintiera frustrada, y mi concepto sobre mí misma, más concretamente un aspecto muy importante en mi vida que es mi trabajo, se viera distorsionado, se viera afectado negativamente.

Como estas cosas suceden, sin que puedas evitarlas y quizás a veces muy a menudo, me encanta de vez en cuando hacerme una "técnica de autoafirmación".

Suena un poco raro, pero cuando pasas por algunas circunstancias en la vida, cuando pones tu confianza en gente y te fallan una y otra vez, empiezas a pensar que el problema quizás es tuyo.

Y realmente, no nos podemos boicotear a nosotros mismos, pensando que somos el problema. Sí es posible que tengamos que cambiar algún aspecto, pero jamás pensar que somos un problema.

Por tanto, cada cierto tiempo si veo que estoy flaqueando a la hora de sentirme bien conmigo misma, si veo que se tambalea mi autoestima, intento volver a reforzarla, recordándome a mí misma que cosas hago, he hecho o haré, como soy, y de verdad que es lo importante de mi vida, y que mi felicidad no depende de nadie que no me haya elegido en su vida también.

Hay gente que usa mantras diarios para no perder la perspectiva de su importancia.

Yo tomé la decisión a raíz de algunas lecturas e investigación sobre el tema, que debía "hacerme consciente de mi propio pensamiento".

No sé si os habéis dado cuenta, que nuestra mente no para de hablarnos.

Hace unos días un prestigioso profesor en Psiquiatra español, Luis Rojas Marcos, confirmaba ese hecho, y nos decía que era normal.

Concretamente nos decía, que nuestra mente se empeña en hablarnos contínuamente, en la mayoría de los casos, se empeña en recordarnos cosas del pasado, no siempre en positivo y en pensar en "pre- ocupaciones" del futuro.

Antiguamente, a la gente que exteriorizaba esos pensamientos hablando sola, los llamaban locos, pero está demostrado que hablar, sacar esos pensamientos y hacernos conscientes de ellos es saludable para nuestra salud mental.

Por tanto, yo escucho los pensamientos que me avocan a sentirme menos, a sentirme mal conmigo misma, me hago consciente de ellos, que realmente no son reales, que no tengo porque sentirme mal, casi siempre los exteriorizo hablando sola y repitiéndome, "eso no es así y lo sabes".

Me repito una a una las cosas que merecen la pena de mi vida y que son fruto de mi esfuerzo, de mi persona, y por supuesto, me animo a disfrutrar de cada momento de pequeña felicidad, que hay tantos al día, y por tanto en concentrarme en ellos.


Yo lo hago de esta manera, pero os invito a que vosotros busquéis la manera de parar esa maraña de pensamientos contra vosotros mismos, porque realmente sois vosotros los que mejor os conocéis.

Y preguntaréis ¿porqué os hablo de esto? ¿Qué tiene que ver con ser padres?

Pues es muy sencillo.

Sé que hay muchas madres y padres, que se encuentran perdidos cuando les llega la paternidad, y comienzan un círculo autodestructivo alrededor de su propia persona del que es difícil salir.

  • La falta de conocimiento.
  • El afrontar tantas situaciones nuevas con nuestros hijos.
  • El estrés y la ansiedad que generan éstas día a día.
  • Las posibles críticas externas sobre nuestra manera de actuar.
  • La falta de consenso entre ambos padres en algunos temas, y las correspondientes confrontaciones.
  • Quizás la soledad o falta de ayuda por parte del entorno.