Ser pobre me convierte en víctima ¡Alimentame!

Publicado el 13 mayo 2018 por Carlosgu82

En la década de 1940 a Marx y Engel que no paraban de estar pensando y pensando, se les ocurrió el termino lumpenproletariado, para hacer referencia a la Clase obrera que según ellos ha perdido la conciencia de clase y se dedica a parasitar a los demás obreros, es decir; criminales, ladrones, vagabundos, drogadictos, etc. Los antisociales y marginados. También incluían a las prostitutas.

Este tipo de personas, en su gran mayoría no busca salir de su situación social sino que se han acostumbrado a vivir chupando los nutrientes de la clase obrera. Marx y Engel también los llamaban: La parte no pensante de la clase baja. Y según ellos, este grupo de marginados fueron usados por la elite en 1948 para que luchen contra los obreros en la revolución europea. Es decir, que Marx los veía como enemigos directos de la clase obrera.

Marx y Engel los veían como parásitos egoístas que no jugaban un rol progresivo en la historia porque no tenían una clara conciencia. Por eso, en lugar de aportar, explotan a la sociedad para su propio beneficio.

Vemos que incluso los pioneros de la repartición equitativa de bienes (comunismo) no estaban muy contentos con aquella parte de la sociedad que no se integraba y no hacia ningún tipo de aportes. Sin embargo, en la actualidad la nueva izquierda progresista ha abandonado a los obreros y ha decidido adoptar  a estos parásitos de los que hablan  Marx y Engel, los llaman victimas del sistema y exigen que el estado los mantenga a través de subsidios de todo tipo y acceso gratis a la vivienda. De esta manera, las nuevas víctimas quedan libres de delinquir y hacerse del dinero que ha costado todo el sudor de los obreros.

En Suecia por ejemplo, muchos de aquellos inmigrantes que viven en la No go zone, reciben ayuda social del estado y se dedican a vender drogas, cometer actos delictivos  y por supuesto le votan a la izquierda casi todos. Esto lo vemos en Venezuela que el gobierno prácticamente manda a los niñas a embarazarse para darles un bono (1 dólar al cambio cada mes) y motivan a los morosos y a los que habitan en viviendas improvisadas que ocupen la casa que les dé la gana aprovechando que los propietarios están de vacaciones. Si en todo caso, que sería lo normal, un propietario no quiere a uno de estos invasores que lo destrozan todo en su casa, pues el gobierno dirá que el propietario es el malo, que es un burgués capitalista y que debería dejarle su casa a las pobres víctimas. Lo mismo en España y se pone peor.

Como ya la clase obrera lo que espera es ser contratado por una multinacional, la izquierda no puede crear problemas entre ellos y los empresarios. No olvidemos que la izquierda crea problemas donde no los hay y divide a la sociedad en grupos contrarios que se tienen que enfrentar como perros que luchan por la bolsa de basura. Como ya no hay espacio para dividir a los ricos contra los pobres y a los jefes contra los obreros, se dedican a encontrar oprimidos para enfrentarlos contra los opresores, en este caso, los lumpenprolerariados son las victimas oprimidas y los obreros son los opresores malvados.

Mientras el socialismo que proponía Marx motivaba a la clase obrera a seguir trabajando, la nueva izquierda progresista motiva a los ociosos a no hacer nada y seguir viviendo de los fondos del estado, que no son otra cosa que los impuestos de quién sí trabaja arduamente.

Con cada ley que se inventan para subsidiar a quien no trabaja, se generan más pobres y la lluvia de dinero público para las victimas tiene que ser cada vez mayor. Claro, este no es un caso de Robin Hood, o de roba al rico y dale al pobre, esto es más bien, roba al trabajador, filtra por el partido político y de lo que quede dale al pobre para que se sienta bien.

Pero no es una práctica exclusiva de la izquierda… Una parte de la derecha también usa de estas estrategias políticas que afectan principalmente al obrero, al hombre y la mujer trabajadora que quiere comer, comprarse una casa, un carro, darle estudio a sus hijos y ahorrar, gente que con el sudor de su frente lucha por su propia prosperidad y la de los suyos y que si no dan lo que tienen a los que no quieren trabajar serán juzgados como los opresores, como los malos.

A los trabajadores se les piden más impuestos y los parásitos se les dan mayores subsidios y no solo eso, sino que muchos de los que reciben ayudas sociales en los países europeos son extranjeros. Gente de otras culturas y otros continentes que llegan sin nada, ni siquiera los ánimos de trabajar y que además solo saben perjudicar.

La nueva izquierda divide a la sociedad en grupos que se enfrenten directamente, para que uno de los grupos sea la víctima y el otro el victimario. Por ejemplo: Los hombres contra las mujeres, los blancos contra los negros, los adultos contra los niños, los padres contra los hijos, los europeos contra los latinos, los heterosexuales contra los homosexuales, en fin, todos contra todos. Se dedican a dividir y a dañar la sociedad, enriquecerse ellos y empobrecer los países.

Por un lado desangran al que trabaja y por el otro crían parásitos subsidio-dependientes.

¿Quiénes son los militantes de la nueva izquierda?

Entre los seguidores de la nueva izquierda progresista se encuentran muchos jóvenes que son alérgicos al trabajo, se tratan la alergia con drogas, tienen problemas de conducta y si les hablan de formar una familia, ellos no quieren responsabilidad porque sería mortal para ellos. Están produciendo lumpenproletarios en serie.