sabe lo extremadamente caro que resulta ser pobre”
James Baldwin
Es una paradoja de la vida, pero lamentablemente, ser pobre sale caro. Y cuando digo pobre, no me estoy refiriendo a mendigos e indigentes. Cuando una persona es mileurista, está por debajo del umbral de la pobreza o le va mal un negocio, todo se vuelve problema tras problema y para resolverlos se necesita dinero y más dinero, convirtiendo su vida en una pesadilla y rezando para que no se rompa o estropee nada. Cuanto menos se tiene más se paga.
Hemos llegado a un punto, en el que el problema no es llegar a fin de mes, es decir, vivir. Sino simplemente sobrevivir. Es inevitable el consumo diario de algo tan básico y necesario, como es la comida, el alquiler o hipoteca, luz, gas o teléfono. Hay personas que cuando ven a un cartero de correos sufren taquicardias. Seguir leyendo...