Billy lleva mucho tiempo con nosotros y todavía nadie ha preguntado por él. Y ¿sabes? deberías animarte a hacerlo; porque Billy es un amor, es un perro dulce y muy cariñoso, tranquilo, de los que le gusta ver la tele bien arrimadito a ti; un perro al que apetece abrazar y del que apetece cuidar.
Mucho, demasiado tiempo en el refugio sin haber conseguido adaptarse a las horas en soledad. Cuando estamos allí, Billy suele vagar por el refugio como un alma en pena, en busca del consuelo y del afecto del que nunca debieron privarle.
Y las horas se nos hacen cortas, y los abrazos nunca son suficientes, y las palabras parecen vagas promesas. La promesa de que en algún lugar está su hogar, un lugar cálido y seguro del que nunca van a volver a echarle.
Quererle es muy fácil, de verdad. Y lo necesita. Y si tú también necesitas dar afecto y recibirlo, en Billy encontrarás al compañero ideal.
Está en Sevilla, pero podemos enviarlo a otras provincias.
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