Por más que se empeñaran los lagartos en hacernos creer con su pegatina de fondo, que no un tifo, que Sevilla son ellos, no hay más realidad que todo lo contrario y clarito que se lo dejamos desde hace tiempo ya.
No hay color entre uno y otro equipo. Ni las ganas a empujones de los verdes en los inicios ni el hecho de jugar cargado de suplentes por cuestiones en las que ellos ni piensan y padecen han podido con la calidad diferente entre uno y otro equipo.
No nos ha hecho falta la manija de Rakitic desde inicio, al cual Emery le ha dado un más que merecido descanso, nos ha bastado con esperar nuestra contra, con esperar el detalle de lujo de Bacca y su hambre de gol, contra perfecta del colombiano que pide a gritos puesto en la selección de su país.
¿Penalty?..
No. Seamos sinceros, no lo fue.
¿Cuántas veces se ha dicho eso de ganar en el último minuto de penalty injusto?.
Pues ahí está. Duele igual que sea en el último minuto que en el minuto veinte de partido. El dolor infringido es igual a la alegría proporcionada.
De ahí en adelante y con los vecinos en inferioridad numérica, sólo cabía sacarlos de quicio para ir mermándole la moral poco a poco y que fueran acusando un cansancio que deberíamos haber acusado nosotros por esfuerzo intersemanal y que por el contrario nos ha puesto alas para seguir con nuestras aspiraciones....Champions League y por supuesto mandar al eterno inferior a donde debe estar, en Segunda División. Hace tiempo que mi "anti" está más marcado que nunca. Hace tiempo que nuestros vecinos, amigos, familiares y demás calaña verde se empeña en hacerme ahondar aun más mi antibeticismo. Ni siquiera me causan sentimiento de pena, no me molesta en absoluto su pena, su llorar por el desastre deportivo de su equipo. A ellos le duele más el bienestar rojiblanco que su pesar durante muchas temporadas.
Tienen lo que se merecen.
Están buscando un milagro. Un milagro que pasaba por ganar hoy y que ha sido hoy mismo donde ese milagro empieza a disiparse, hoy mismo....Domingo de Ramos. Inolvidable inicio de semana de PASIÓN.
Nosotros seguiremos a lo nuestro y ya no nos queda otra que, igualmente, seguir a lo que haga el eterno inferior que no será otra cosa que consumar un descenso en breve.
Enhorabuena a la Sevilla Rojiblanca.