La feria tenía una veintena de stands, entre los que podíamos ver los dedicados a ocio, merchandising, cultura, bonsáis y gastronomía.
En el escenario central hubo exhibiciones de artes marciales, un concierto acústico al atardecer, danza y un taller de vestir kimono.
Fue un dia fabuloso, rodeado por mi familia, amigos y una amiga especial que vive lejos y que pude ver ese día.
Un hociquito japonés.