Sexualización, el más rentable de los negocios

Por Cristina Cristina García @MundosdeCris
Quizá a much@s de vosotr@s el título os de la impresión que nada tiene que ver este post con el tema del blog (infancia y juventud), pero nada más lejos de la realidad.
Hablo de lo que veo en la sociedad; y para que veáis que no exagero; os cuento una experiencia personal.
Existen varios modos de aprendizaje y el más "usado", por decirlo de alguna forma, es el aprendizaje vicario; es decir, el aprendizaje por observación; y es una gran verdad que los niños aprenden, interiorizan y normalizan para su vida de adultos aquello que les rodea en sus primeros años de vida; aquellos hábitos, rutinas y conductas con los que crece día a día en casa; así que sí, la sexualización a la que esta sometida esta sociedad mucho tiene que ver con el tema que aquí nos atañe.
¿ A qué viene que precisamente hoy me dedique a escribir sobre esto?  Hay muchos temas sobre los que hablar y me gusta tener una estructuración, una coherencia; pero no siempre tengo pensado un tema para una entrada, a veces simplemente pasa algo en mi día a día que me hace pensar podrías escribir sobre esto, y exactamente es lo que me ha pasado hoy. Al entrar en Facebook alguien había compartido una publicación sobre una chica que realiza un proyecto fotográfico para su trabajo de fin de carrera; dichas fotografías las colgaba en su instagram hasta que esta red social ha prohibido una de ellas por considerarla ofensiva y no acorde a las normas estipuladas; dicha fotografía no era pornográfica; ni xenófoga, ni violenta, ... que es lo que parece lógico pensar y que curiosamente, llenan esta red social. No, la foto de esta chica era de sí misma, tumbada en su cama dando la espalda a la cámara; lleva una camiseta blanca y un pantalón gris que tiene una pequeña mancha de sangre en su entre pierna y otra en la sabana. Quizá muchos de vosotr@s sepáis de qué foto estoy hablando; no obstante no voy a publicarla aquí, pero sí el texto que esta chica a dedicado a los administrares de instagram:
Gracias, Instagram, por proporcionarme la respuesta precisa que mi trabajo fue creado para criticar. Eliminaste mi imagen dos veces, declarando que viola las reglas de la comunidad. No me disculparé por no alimentar el ego y el orgullo de una sociedad misógina que quiere ver mi cuerpo en ropa interior, pero se incomoda por una pequeña mancha. cuando tus páginas están llenas de innumerables fotos/cuentas en las que las mujeres (muchas de ellas menores de edad) son cosificadas, pornificadas y tratadas como menos que humanas. ¡gracias!Como parte de mi proyecto final para mi curso de retórica visual hice esta imagen junto con un set completo que puedes ver en www.rupikaur.com para desmitificar la menstruación y hacer que algo que es innato "normal" nuevamente, porque las categorías de violación y de pornografía están bien. La cosificación y la sexualización están bien. las personas masturbándose viendo mujeres desnudas cuando son menores de edad. El bondage. La tortura. La humillación. El abuso está bien, pero esto les incomoda. Ese es el objetivo de este trabajo. Hacerte sentir tan incómodo como deberías sentirte cuando ves que otras personas son objeto de abusos y cosificación. Esto solo demuestra quién está sentado detrás del escritorio. Y quién controla el show. Quién controla los medios de comunicación y quién nos censura. A algunas mujeres no se les permite entrar a los espacios religiosos. No se les permite salir de sus casas. Hacer ciertas cosas. Y se les dice que están enfermas. Como si la menstruación fuera un resfriado. Sí. Esto sucede aquí en Norteamérica. He sido hospitalizada muchas veces debido a causas asociadas con mi menstruaicón. He sufrido de una enfermedad relacionada con mi menstruación. Y desde entonces, he estado trabajando mucho para amarla. Abrazarla. Celebrarla. Aunque me ha dado tantos dolores en los últimos años. Y quieren decirme que debo callarme esto. Que todo esto que experimentamos de manera colectiva no debe ser visto. Sólo experimentado secretamente a puerta cerrada. Es por eso que es tan importante. Porque cuando menstrué por primera vez, mi mamá se puso triste y se preocupó. Y quieren censurar todo ese dolor. La experiencia. El aprendizaje. No. El patriarcado se escapa. La misoginia se escapa. No seremos censuradas. Sangro cada mes para ayudar a que la humanidad sea posible. Mi útero es el hogar de la divinidad. Una fuente de vida para nuestra especie. Ya sea que decida crear vida o no. Pero pocas veces es vista así. En civilizaciones antiguas, la sangre era considerada sgrada. En algunas de sociedades todavía es así. Pero la mayoría de las personas, sociedades y comunidades desprecian este proceso natural. Algunas se sienten más cómodas con la pornificación de las mujeres. La sexualización de las mujeres. La violencia y degradación de las mujeres que con esto. No quieren que se les moleste para que no tengan que expresar su asco. Pero se enojan y se molestan por esto. Nosotras menstruamos y lo ven como algo sucio. Como si buscáramos recibir atención. Enfermas. Una molestia. Como si este proceso fuera menos natural que el respirar. Como si no fuera un puente entre este universo y el último. Como si este proceso no fuera equivalente al amor. Al trabajo de parto. A la vida. Sin egoísmo y maravillosamente hermoso.
Tras leer estás palabras, he reflexionado, como espero que lo hayáis hecho vosotr@s. Después de años y años luchando por la igualdad de genero, la igualdad de oportunidades, luchar por tener que demostrar que valemos tanto como los hombres y que somos igual de aptas y capaces, esta sociedad esta echando todo eso a perder gracias a canales televisivos que fomentan programas tales como MYHYV; Gran hermano; Sin tetas no hay paraíso; Betty, la fea; Supervivientes; y otros tantos de la misma índole que se recrean en el sexo, la sexualización y la estereotipación de mujeres y hombres de un físico idílico imposible de alcanzar, al menos, no de una manera saludable.
Y estos programas, he de reconocer muy a mi pesar que son los más exitosos y no sólo entre la población adulta; pues muchos de estos adultos sintonizan estos programas en presencia de los más pequeños (también los más impresionables); sin ser conscientes que eso es lo que les están inculcando; que lo más importante es el físico y si no eres guap@ según los parámetros establecidos por la sociedad no eres valido. Por no hablar de los adolescentes que manejar ell@s mim@s las TV que en la mayoría de los casos tienen en sus propias habitaciones.
Obviamente no todo lo que se reproduce en los medios televisivos es peyorativo; y para ello me remito a la evolución del papel de la mujer que ha mostrado la mayor empresa infantil a nivel mundial : Disney.

Sobre Frozen no he incorporado en el vídeo un trozo de la película porque encontré este que me ha encantado y quería compartir con vosotros.

Sin embargo, por más y más que se luche contra un estereotipo de mujer no sólo ofensivo, sino denigrante y contraproducente, este predominio de los cánones de belleza y obsesión por lo sexual no sólo esta presente en nuestra vida cotidiana, sino que además nos parece normal, ¿no me creéis? Os voy a contar algo que me pasó:
No os voy a hablar de que me persiguieran por la calle o me dijesen obscenidades desconocidos (que también me ha pasado), no. Os voy a hablar de un contexto supuestamente de confianza; un entorno de amigos; concretamente los amigos de mi pareja: el día que les conocí.
Acompañé a mi chico al bar en el primer partido de España en el mundial, no porque yo sea aficionada a este deporte, sino porque él quería presentarme a sus amigos. Como ya he dicho el futból no merece mi atención por lo que estuve hablando con las otras dos chicas allí presentes; cuando una de ellas se marchó, la otra me hablaba de su sobrina y se dispuso a enseñarme fotos de la pequeña; hasta aquí todo normal ¿verdad? Bien. Al entrar a su carpeta de fotos en el móvil ví una foto de... ¿estáis sentad@s? ¡ mis pechos ! sí, cómo lo leéis; los amigos de mi chico se habían dedicado a hacer fotos a mi escote y pasarla por WhatsApp.
Obviemos la violación de mi intimidad. Me sentí cosificada; alienada ... es tan humillante que te reduzcan a una parte de ti; que te despersonifiquen, te quiten tu identidad con esa facilidad dejándote únicamente en algo tan... ¿Resultado? Que a pesar de ser una persona segura de mi misma y que ha conseguido superar sus complejos físicos a día de hoy no he vuelto a ponerme más que ropa de cuello alto en presencia de estas personas, además de la continua sensación de incomodidad.
No sé si por calmar los ánimos o  porque ciertamente ella tiene normalizada esta situación pero la chica me dijo que no le diera importancia, que sus amigos eran así, pero no lo hacían con malicia y que no se lo contase a mi chico por no generar conflicto (lógicamente se lo conté).
Pero este tipo de cosas no ocurren únicamente en el mundo adulto; desde muy pequeños instauramos roles con comentarios tales cómo "los niños no lloran", "si lloras te pondrás fea y no le gustarás a nadie", "los niños no juegan con muñecas/cocinas", "las niñas no juegan con coches". Y no sólo son las frases que nos dicen directamente, sino lo que interiorizamos por aprendizaje vicario del lenguaje común como que algo que es un coñazo es aburrido; si es la polla es muy bueno; si haces algo como una niña es porque no lo haces bien, ... Y aquí podemos verlo.

Nunca olvidemos que el lenguaje es una herramienta muy poderosa y que nuestros niños aprenden lo que les enseñamos tanto de manera consciente cuando te sientas con ellos hacer los deberes, como de manera inconsciente cuando te ven o te oyen.
¿Hablamos de las revistas juveniles? Una imagen dice más que mil palabras, bueno pues aquí os dejo dos:
 
Estas revistas denominadas juveniles se empiezan a leer alrededor de los 10 años; yo misma he sido lectora durante los años de mi adolescencia y a parte del ejemplo de estás portadas que te dicen que tienes que echarte un millón de potingues en la cara para ser guapa; tratan otros temas tales como el sexo, el ligue, dietas,... además de fotos y fotos de famosas retocadas con fotoshop para promover ese ideal de belleza inalcanzable del que hablaba antes; ¿qué se consigue con esto? Crear una necesidad consumista innecesaria en las jóvenes de hoy que gracias a estas revistas, al bombardeo televisivo y los mensajes que han recibido desde pequeñ@s nunca estarán contentos con su cuerpo; esto, la percepción de nosotros mismo se denomina autoconcepto, un mal autoconcepto desemboca en una mala autoestima y de la mala autoestima se desembocan tantos trastornos que necesitan un post propio.
Pero, ¿tanto poder tiene una simple revista o un simple anuncio de televisión? Por sí sólo no, pero pongamos en situación: tengo 12 años, veo la foto de mi famosa favorita y quiero vestir igual que ella así que voy al centro comercial a las tiendas que cada vez fabrican ropa más pequeña etiquetándola con medidas grandes y por más prendas que me pruebo debo recurrir a las tallas grandes o directamente no encuentro talla para mí; esto me ocurre en una tienda, en otra, en otra, en otra más... ¿resultado? ¡Qué gorda estoy! ¡Qué fea soy! Nadie me va a querer.
¿Cuándo dejamos de gustarnos a nosotros mismos?

Otro apunte... El fabricar ropa cada vez más pequeña reporta un gran beneficio económico a las empresas ya que pueden llegar a un público más amplio; pues es bien sabido que los pequeños quieren parecerse a los mayores y ¿qué hay mejor que vestir cómo ellos? Así niñas de 11 años, visten igual que las de 20.
Esto, queridos lectores es lo que consiguen nuestros maravillosos medios de comunicación si nosotros no les decimos a nuestros pequeños que son maravillosos tal cómo son y que les querremos incondicionalmente; si no les inculcamos unos valores firmes sin prejuicios ni estereotipos, diciéndoles que pueden conseguir todo cuanto se propongan con esfuerzo y trabajo; ya hablábamos de esto mismo en el post ¿Qué leer a mis niños?
¿Qué esto sólo afecta a partir de la adolescencia decís? Dejadme hablar de un acontecimiento donde las niñas dejan de ser niñas para convertirse en muñecas barnizadas, las visten con ropa de muñeca, las pintan como muñecas, y se comportan como muñecas; estoy hablando de los concursos de belleza infantiles, porque sí, la foto que encabeza este post, aunque no lo creáis es una niña de 6 años. Maquillaje, pestañas postizas, vestidos, tacones, pelucas, depilación, relleno, tintes, lacas,... y otros muchos, muchísimos artículos de "belleza" son los mejores amigos de estas niñas.
 
 
 
Podría seguir y seguir hablando sobre esto pues tiene mucha carne para asar, pero este post sería eterno y ahora, a quienes les taca hablar es a vosotros ¿qué pensáis? ¿creéis que son los valores adecuados para nuestros niñ@s?