Shampoo en barra Fructis de Garnier, limpieza sin residuos plásticos.

Si están buscando una opción ecológica de lavar el pelo, Garnier acaba de lanzar en Argentina su shampoo sólido. Es biodegradable, tiene un 94% de ingredientes de origen vegetal y reemplaza el uso de hasta 2 botellas de producto.

Su presentación es en pastilla de 60 gramos. Las opciones son: Aguacate para nutrición de cabello seco, Coco reparador, Sandía revitalizante para cabello normal , Banana para aportar fuerza a los cabellos débiles y Aloe Vera para hidratación.

Pueden usarlo todas las veces que quieran. No tiene colorantes, parabenos ni siliconas, es vegano y hasta hasta el packaging está hecho de cartón reciclado. No tiene aceite de palma ni es saponificado, así que el pH es adecuado para el cuero cabelludo. Eso si, tiene perfume.

La barra de Aguacate que tengo tiene entre sus ingredientes palta nutritiva, aceite de romero que evita que el pelo se caiga, además de ser antiinflamatorio, eso quiere decir que evita picazón y previene la descamación y caspa. También tiene manteca de karité nutritiva y aceite de girasol que evita el frizz, refuerza la fibra y la vuelve más manejable. Vitamina E antioxidante, extracto de hoja de romero vitalizante,

Sus surfactantes son: sodium cocoyl isethionate, que remueve la suciedad sin resecar y dejando el pelo y el cuero cabelludo hidratado, además de remover el Build up. Además tiene un derivado del aceite de coco y sodium coco sulfate.

¿Cómo se usa?

Mojen el pelo y la barra de shampoo.
Froten la barra en el cuero cabelludo y puntas para crear espuma. Hace menos espuma que un shampoo tradicional, tengan eso en cuenta. También pueden frotar el shampoo en las manos y después aplicar en el pelo.
Masajeen el pelo.
Enjuaguen.
Pueden usar acondicionador y mascarilla si el pelo lo necesita o lo quieren. Si prefieren algo más natural pueden reemplazar estos dos pasos con un poco de vinagre para que regule el pH. Mezclen en un vaso 1/3 de vinagre y 2/3 de agua y apliquen sobre el pelo, después vuelvan a enjuagar.

Después del uso guarden la pastilla en un lugar seco para que se conserve mejor.Puede ser que algunos cabellos necesiten un tiempo de adaptación a este tipo de limpieza, sobre todo si el shampoo sólido es saponificado (mezcla de sustancias grasas con hidróxido sódico/soda cáustica). O también ser que al principio el pelo quede divino quede muy engrasado o hasta que se te reseque, pero lo ideal es que le den varias oportunidades.

Mi relación con los jabones en barra nunca fue muy buena. Al principio me resultan geniales y al poco tiempo empiezan a irritar mi cuero cabelludo. El único que fue excepción fue el Godiva de Lush, que hoy no se fabrica más.Por ahora, y después de varios días de prueba, no hay noticias de la irritación. Debo reconocer que uso el shampoo con precaución y alterno con mi shampoo de siempre. Todas las veces que lo usé me dejó el pelo con mucho brillo y muy suave, con poco movimiento pero me gusta como se siente al tacto cuando paso los dedos (no soy de peinarme). Lo usé una o dos veces sin acondicionador pero me costó mucho desenredarlo, así que le agregué un poco de acondicionador en las puntas. Estoy usando el Fructis de Sandía y hasta ahora no usé mascarillas. Crucemos los dedos para que no me irrite, pero quiero aclarar que mi cuero cabelludo siempre fue sensible a varios tipos de shampooes, no sólo con los que son en barra. Así que por ahora mi pelo lo acepta y me parece una opción excelente para lavar el pelo de una manera ecológica y sustentable. Además, dura lo mismo que usar dos botellas de shampoo Fructis.

Ya está a la venta en cperfumerías y supermercados donde vendan la marca Garnier.