Se trata del Equivalent Exchange, un curioso tono entre gris plata y malva que queda muy favorecedor. Les cuento cómo lo trabajé.
El trabajo el look es sencillísimo y sin embargo miren qué bonito tono resulta, que no se ve como uno solo, sino como varios.
Aprovecho para enseñarles mejor la ropa que llevaba esa noche: la camiseta me gusta mucho por el estampado y el color, pero no le sacaba mucho partido porque al ser larga y algo ajustada con vaqueros quedaba un poco rara. Pese a que no me gusto mucho con leggins, la verdad es que es la mejor combinación, así que me atreví a probar...
Llevaba sandalias porque fue durante Octubre, que ya saben que hemos seguido pasando calor, pero imagino que con unas botas podré retomar este invierno alguna combinación con leggins, que son muy cómodos.
¿Les ha gustado el equivalent exchange?
BESOS!