Después del parón del que os hablaba ayer, vuelvo con mis descubrimientos veraniegos.
Que levante la mano quién no se tomaría estos días ("¡cuando arriva a casa!") una sangría o un tinto de verano fresquitos.
¿Y porqué no lo hacemos? Pues cada uno tendrá sus motivos. En mi caso, llamadme rara, pero darle al vino tinto, a diario y sin control, en mi casa, no lo veo.
Sin embargo, el otro día, en una de mis visitas al Tea Shop, tuve la suerte de que me atendiera una dependienta estupenda. Lo siento mucho, se me olvidó preguntarle el nombre pero lo haré en mi próxima visita. Atiende en el C.C. La Vaguada.
Estuvo enseñándome infusiones que pudiera hacer en frío, hasta que dimos con una de las que han lanzado justo este verano, llamada Sangria Tea.
De entrada os diré que es imposible irte de allí sin picar, porque el olor que desprende la lata cuando se abre es un alucine. Dan ganas de meter la cabeza dentro. La infusión es un preparado a base de remolacha, manzana, naranja, pasas e hibisco, es decir, sin teína.
La chica (nota mental: ¡pregúntale el nombre!) me dio las claves para hacer de esta infusión, un refresco de verano realmente exquisito.
El truco está en hacerla muy concentrada (unas 10 cucharaditas por cada litro de agua) y dejarla infusionar durante, al menos 10 minutos para que suelte bien todos los aromas (al no llevar té no corremos el riesgo de que amargue si lo dejamos demasiado tiempo). Por cierto, yo no le puse ningún tipo de edulcorante ni azúcar porque, en mi opinión, no lo necesita pero sobre gustos ya se sabe...
Después añadimos bastante hielo (por lo que es importante que la concentración sea alta) para que enfríe bien y un buén chorrito de Casera (tenéis la opción "Casera cero calorías" si queréis acabar con cualquier remordimiento) en una proporción aproximada de 1 parte de casera y 2 de infusión.
Cuando hice la foto, buscaba un refresco rápido así que sólo le puse una rodajita de limón, pero supongo que si le añadimos unos cubitos de manzana o de melocotón, tiene que ser la bomba. E incluso, se me ocurre así sobre la marcha que se puede probar a añadir al agua un palito de canela.
Yo creo que el resultado de este invento es una maravilla, incluso para aquellas personas a las que el mundo de las infusiones no le emocione especialmente.
Bueno amores, no se si conocíais esta novedad de Tea Shop y si la habéis probado de alguna forma parecida. Espero ansiosa vuestras opiniones y vuestras propuestas.
Pasad un feliz martes preciosidades.
Besicos