El malvado en nada participa del bien, y la injusticia era la sustracción del bien: quien no posee nada que se le pueda sustraer tampoco tiene nada en lo que sufrir injusticia.
(...)
El bueno ni comete injusticia ni la sufre: no la comete por voluntad propia y no la sufre por virtud. El hombre malvado comete injusticia, pero no la sufre: la comete por vileza, pero no la sufre por ausencia del bien. Más aún, si sólo la virtud es un bien y no otra cosa, el hombre malvado, que no posee la virtud, tampoco tiene en qué sufrir injusticia. Pero si, además de la virtud, también son bienes los del cuerpo, la fortuna externa y sus adláteres, en ausencia de la virtud es preferible que falten también éstos a que no. De modo que ni siquiera así sufriría injusticia el malvado, privado de algo de lo que hace mal uso. Por lo tanto, comete injusticia, pero no la sufre, desde el momento en que hemos asignado lo injusto a la intención.
Así hablaré ahora de los perversos. El malvado quiere cometer injusticia, pero no es capaz. Pero, como quiere, la proyecta hacia un semejante o hacia alguien mejor. ¿Y qué habrá de hacer quien es mejor? ¿Responder al malvado con otra injusticia? Pero éste no tiene en qué sufrir injusticia, pues es malvado por la ausencia de bien. De modo que el hombre inteligente no devolverá la injusticia al malvado ni de hecho, pues no tiene en qué sufrir injusticia, ni en su intención, pues, como es bueno, no quiere cometer injusticia, no más que el flautista tocar la flauta desafinadamente. En general, si cometer injusticia es malo, otro tanto es devolverla, pues quien comete injusticia no aventaja en iniquidad por haber sido el primero, sino que quien la devuelve queda igualado en vileza al replicar. Es más, si quien comete injusticia obra mal, el que devuelve mal por mal no obra menos mal, aunque esté defendiéndose. Del mismo modo que quien devuelve un favor a quien antes se lo había hecho no obra menos bien por haber recibido previamente el favor, así también quien troca su contestación en maldad no actúa menos mal por haberla sufrido él antes.
Máximo de Tiro