"Si el amor es una isla" de Esther Sanz, por Rocío Carralón

Publicado el 05 marzo 2014 por Librosquevoyleyendo @librosqvleyendo

Sinopsis

Luisa viaja a una pequeña isla del canal de la Mancha donde el tiempo se detuvo hace siglos. Allí trabajará en un exquisito hotel regentado por un hombre misterioso que lo dirige con mano firme y estrictas reglas. Desobedecerlas tiene castigo,sin embargo, Luisa no puede controlar su curiosidad y se verá en vuelta en situaciones límite y juegos oscuros ideados por el jefe. Su osadía será castigada, pero resolver el misterio que envuelve al amo tendrá recompensa. Él, exigente y distante, y ella, curiosa y de espíritu intrépido, chocan estrepitosamente. O de forma espectacular, depende de cómo se mire. Secretos, aventuras y enfrentamientos dan paso a un tórrido romance que bebe directamente de las grandes novelas románticas de siglo XIX.

Datos Técnicos
Editorial: Destino
Número de páginas: 296 Encuadernación: Tapa blanda / Ebook ISBN: 9788408124306 Año de edición: 2014 Precio: 14,15€ / 10,44€
Sobre el autor: Esther Sanz
Impresiones

Esther nos propone un viaje a una isla misteriosa, la protagonista se embarca en un trabajo con el que nunca hubiera soñado, abandonando sus estudios en la universidad por ayudar a su padre enfermo. Las duras condiciones del puesto se suplen con el con el sustancioso sueldo que cobrará a fin de mes. Pero no cuenta con que la pequeña isla de Sark, es un misterio en su conjunto. Tampoco ayudan a su integración las mil y una historias que van llegando a sus oídos y que la hacen preguntarse el por qué de todo. Con compañeros igual de raros, se plantea en alguna ocasión si no se habrá equivocado. Pero su tesón y el fin por el que lo hace, junto las ansias de escapar también de su pasado, la obligan a cumplir el año de contrato y jugar a “amos y sirvientes” en una isla que parece no haber escapado del feudalismo. Hecho que además no dista mucho de la realidad de hace relativamente poco tiempo.
No es el primer libro que leo de la autora, aunque sí el primero que reseño. Lo que más me atrae es la forma de atrapar desde su inicio. Ese hilo conductor misterioso que propone, hace que el lector se introduzca de lleno en la historia. Con un lenguaje sencillo que va narrando de forma detallada a los personajes, haciéndonos partícipes de la historia. Nunca se queda en los personajes principales, juega mucho también con los secundados, que en determinados capítulos se convierten en los protagonistas. Estos detalles nos permiten no abandonar el libro, porque sus pequeños puntos de giro nos proponen que divaguemos y saquemos nuestras propias conjeturas. No es una historia larga, en una tarde lo puedes terminar. Pero también me ha pasado con los anteriores libros. En su fondo es viaje interior, una superación de viejas heridas y destape de mentiras que harán evolucionar a todos. Incluso el propio hotel Silence Hill evoluciona.
Como trama paralela nos encontraremos una historia romántica, no resultando artificial, es un conjunto.
Con Esther Sanz podemos comprobar algo que desde mi punto de vista está convirtiéndose en un fenómeno digno de tratar. En las redes los escritores nos conocemos. Pero lo más curioso es que aun en un mundo tan competitivo, están para echarse una mano y hacerse publicidad mutua. Desde luego hay también gente que pone la zancadilla, pero como en todos los sitios. En este caso Esther menciona a Rocío Carmona, en su historia por ejemplo. Estos detalles que tienen muchos autores, hacen que el panorama de la literatura nacional cada vez esté cogiendo más auge.
No sabría muy bien como catalogar la historia; juvenil no es, pero tampoco es adulta, ni tiene un tema demasiado profundo, más bien creo que pone temas más serios que en una novela juvenil, pero tratados de una forma más sencilla; romántica sí, pero no es su trama principal. La catalogaría como Young adult, pero no sé si realmente podría enmarcarse en este género.
La única pega que podría ponerle es tal vez que el final autoconclusivo me ha parecido un poco precipitado. Hubiera preferido unas páginas más para que hubiera desarrollado la última parte de otra forma.
La portada es tiene un halo de nostalgia que refleja la historia en sí misma.
No puedo decir que me haya gustado más que su trilogía anterior. Dentro de ser fiel a su estilo narrativo, son géneros distintos.

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