Para apreciar las diferencias ideológicas entre los partidos conservador y progresista español (lo mismo que para apreciarlas entre el partido republicano y el demócrata estadounidense), hay que coger una lupa y examinar a los cuatro muy de cerca. Pues a la distancia de un continente a otro son inexistentes.
No se necesitan pruebas contundentes de lo que afirmo, pues las que hay son de sobra evidentes. Los dos partidos yanquis son imperialistas, y los dos españoles son lacayos del imperialismo.