Adrian Salvador y Lucas Zaragosí, conocidos como Siemprevivas, nos habían citado a las 11:00 am para presentarnos su nueva creación ss15. El jardín Botánico, un lugar que parece sacado de un cuento de hadas, o el escenario de cualquiera de los desfiles de la paralela, París Fashion Week, se convertía en el lugar más indicado para presentar una de las mejores, por no decir la mejor, de las colecciones que he visto en esta edición de la semana de la moda de Valencia. Silhouettes, es una oda a la elegancia y la limpieza, una colección de la que te enamoras una y otra vez, por lo que es y por lo que significa. Aquel invernadero recibía a los invitados de manera seductora y secreta, poco a poco fuimos colocándonos en el centro del Jardín sin saber que esperarnos, y entonces empezaron a aparecer las salidas, piezas de ensueño, tejidos microperforados, que tomaban forma de vestidos, faldas, tops y abrigos, cascadas de tul de seda que se deslizaba entre las prendas o en otras anundandose bajo el corte imperio. Así se escribía este cuento, huyendo del formato pasarela, las modelos tomaron posiciones, y entonces se nos permitió, tocar y ver en primera mano cada una de las piezas de la colección, los detalles, los acabados, los cortes y los tejido, una decisión arriesgada que terminaría siendo en este caso todo un acierto, y es que si hay algo en lo que el equipo Siemprevivas es especialista es en cuidar todos y cada uno de los detalles de sus colecciones, como piezas impresas en 3D, o los cierres perfectamente terminados, desde la fabricación hasta la presentación demostrando que la pasarela no es el único medio para brillar, no hace falta, porque cuando las prendas y la propuesta brilla por si sola, no hace falta nada más.