Mencionó que el 90 por ciento de los incendios son producidos por la mano del hombre, lo cual pudiera ser un factor de la presencia de siniestros en los fraccionamientos que se construyan en la Sierra de San Miguelito.
Sin embargo, aun cuando se siguieran al pie de la letra todas las recomendaciones en materia de protección civil para evitar estos incendios, hay otro 10 por ciento de siniestros que podrían iniciarse de manera natural.
El profesor e investigador universitario declaró que cuando la vegetación de estas zonas está seca es muy propensa a incendiarse cuando se combina con otros factores como pueden ser: “las gotas del rocío de la mañana que pudieran actuar como lupas frente a los rayos del sol; la energía electrostática producida por la fricción del viento con cualquier objeto e incluso algún rayo que pudiera encender las llamas en la vegetación”.
Manifestó que los problemas de incendios forestales que se presentan en la Sierra de San Miguelito impactan sobre la calidad del aire: “ya que contribuyen a las emisiones que se tienen sobre la ciudad o cuenca atmosférica donde se encuentra la mancha urbana por aspectos naturales de compuestos orgánicos y de combustión que son emitidos a la atmósfera”.
Completó que el 90 por ciento de los incendios que son causados de manera antropogénica son debidos a actividades como alguna quema agrícola, tirar colillas de cigarro, las fogatas o botellas de vidrio en los días de campo.
Y consideró que no se debería construir en la Sierra de San Miguelito ya que “es una zona que es el único pulmón natural que tenemos hoy en día en la zona urbana”, pues subrayó que además la importancia de la conservación de la flora y fauna.