Hace tiempo que no publicaba ningún escrito mío y he decido ponerle remedio.
Cuando ya nada exista, sólo quedaran las palabras escritas, perdidas en cualquier cajón, en estanterías cubiertas de polvo, esperando ser leídas por alguien que ame las letras.
Todo está en silencio,
no hay viento,
el viento solo mueve ramas vacías,
los pájaros ya no cantan,
demasiada calma.
Un silencio inquieto,
incomodo, casi aterrador,
como si la muerte hubiera
venido de visita.
Solo queda esperar el último adiós,
ahora solo queda,
que deje de latir el tiempo,
queda la espera,
a que se acerque
a las almas
que aún quedan vivas.
El sonido se apagó,
el mundo quedo en silencio,
los fantasmas revolotean las tumbas,
esperando el último suspiro.
Escribir hace sentir vivo, hace fluir la creatividad, poner letras en el papel da sentido a una parte de la vida.
El sonido del silencio- Instrumental
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