Desde el pasado 2 de noviembre, cuando se confirmó su lesión, hasta ahora, Mario ha sido baja en los encuentros ante Athletic, Villarreal, Getafe, Elche, Valencia, Levante, Málaga, Barcelona y Sevilla, en la Liga; en las eliminatorias de Copa del Rey contra Sant Andreu y Valencia; y en las tres últimas jornadas de la fase de grupos de la Liga de Campeones ante Austria Viena, Zenit y Oporto.
Hoy, tras más de dos meses y medio, se reincorporó a los entrenamientos con el grupo en la sesión matutina en la Ciudad Deportiva de Majadahonda. Aunque aún está a la espera de recibir el alta médica, su regreso a la competición está ya próximo, con lo que Simeone recupera a un futbolista importante en su esquema.
Antes de su lesión, Mario Suárez había disputado siete encuentros de Liga, todos como titular y cinco completos; uno de la Liga de Campeones, también de inicio y durante los 90 minutos, frente al Zenit en el Vicente Calderón (3-1); y los dos choques de la Supercopa de España contra el Barcelona del pasado mes de agosto.
Ahora, a la espera del alta médica, está de nuevo a disposición del técnico, que tiene una opción más para el medio centro, donde ha empleado principalmente los últimos dos meses a Tiago Mendes y Gabi Fernández, en ocasiones a Koke Resurrección, cuando uno de los dos anteriores era baja, y muy poco al francés Josuha Guilavogui.
La recuperación de Mario deja vacía, de momento, la enfermería del equipo madrileño para el segundo tramo de la temporada, cuya siguiente parada será el encuentro de ida de los cuartos de final de la Copa del Rey frente al Athletic Club, el próximo jueves en el estadio Vicente Calderón.
Para ese duelo, Simeone está pendiente de la evolución del portugués Tiago Mendes. El centrocampista, baja por una sobrecarga en el último duelo contra el Sevilla, continuó hoy con su puesta a punto al margen del grupo junto a Óscar Pitillas, preparador físico recuperador del equipo, y es duda para enfrentarse al Athletic Club.