Simmons contra Watney

Publicado el 13 noviembre 2015 por Rebecasanchez
Ya sé que llego tarde, que hace semanas que se emitió 4722 Hours, el quinto capítulo de la tercera temporada de Agents of SHIELD, de los mejores episodios de la serie hasta el momento y, me atrevo a afirmar, que uno de los mejores de esta temporada 2015/16. Llego tarde porque no quería escribir nada sobre 4722 Hours hasta haber visto The Martian, película con la que guarda un gran parecido. Sin embargo, Titley, guionista del episodio, asegura que su libreto se inspira en uno de los tropos más perdurables de la ciencia ficción, el del Robinson planetario; y en películas como Enemy Mine. Tras ver el capítulo, concuerdo con su visión pero es inevitable relacionar la odisea de Simmons con la que vive el personaje de Matt Damon en The Martian
4722 Hours es un excelente capítulo que explica qué pasó con la joven científica de SHIELD tras ser engullida por el monolito al final de la segunda temporada. Simmons pasó seis meses en otro planeta, un lugar inhóspito, árido y hostil que la obligó a agudizar su ingenio y forzar sus límites para sobrevivir. Vemos cómo Jemma -y su móvil de inagotable batería- espera al equipo de rescate, cómo busca una fuente de agua, cómo lucha contra unos monstruosos tentáculos, cómo consigue alimento y cómo descubre que no está sola en ese remoto planeta al ser atrapada en una jaula por Wiil, un astronauta que lleva 14 años varado en ese planeta. 
La actriz Elizabeth Henstridge sobrelleva con entereza el peso del capítulo. El plus que añade Dillon Casey, como Will, permite construir un episodio intimista pero dinámico que destaca del resto gracias a una intro, estructura y estética diferentes. Henstridge está fantástica y tengo que decir que la joven tiene mucho más carisma que Matt Damon, cuya epopeya marciana me dejó fría. La historia de The Martian no despertó mi interés ni empaticé con el personaje. Sin embargo, en seguida me puse en la piel de Jemma y de Will, sufriendo y emocionándome con su vida en ese páramo extraterrestre. 
4722 Hours es una historia que funciona. A priori, pudiera parecer que una trama desarrollada en un único lugar y centrada en un único personaje no permitiría que la serie avanzase pero sí lo hace. La relación entre Fitz y Simmons se encuentra en una encrucijada interesante de ver, solo espero que los guionistas afronten este escollo en el camino de manera adecuada. La historia de Will ya ha generado múltiples teorías, algunas de ellas de lo más jugosas que, bien introducidas en Agents of SHIELD, podrían deparar un futuro lleno de emoción.
La evolución de los agentes
A estas alturas, con 51 episodios emitidos, es agradable comprobar que una serie con personajes femeninos muy potentes (May, Bobbi) y que ya había jugado con nuestras expectativas al redefinir y redibujar a dos de sus protagonistas masculinos (Ward, Fitz), apuesta por profundizar y dar mayor protagonismo a Simmons, un personaje que siempre había estado al servicio de los demás pero que pocas veces había destacado en solitario. Cambiamos, de nuevo, el status quo de su relación con Fitz y descubrimos su extraordinaria fortaleza. Así, la recolocamos en el tablero como una pieza con mayor relevancia, siempre a punto para sorprender al espectador. 
El salto de calidad de la serie, producto que durante su primera año no logró encontrar un tono adecuado, se dio cuando integró en su trama los acontecimientos de Capitán América: El Soldado de Invierno. Esta sinergia con el UCM hizo que la serie diera un salto de calidad en los últimos capítulos de su primera temporada, tendencia que se confirmó durante la segunda entrega al equilibrar sabiamente su mitología (los Inhumanos) con los eventos cinematográficos y el desarrollo de personajes. La tercera temporada está ensamblando las nuevas piezas, definiendo mejor sus objetivos, ampliando su sentido del entretenimiento y confirmando lo que todos esperábamos hace dos años, que Agents of SHIELD es más que un pasatiempo intrascendente, que estamos ante un producto con identidad propia, totalmente asentado y consciente de lo que quiere y lo que necesita. Por eso hemos podido disfrutar de un capítulo como 4722 Hours y, por eso , merece la pena darles una oportunidad a los espías de Coulson.