Le prometí a un amigo escribir sobre el tema aunque me lapiden lingüísticamente.
No quiero describir el valor que derrocha un hombre o una mujer por ponerse delante de un animal y al que le puede herir gravemente... morir en esta profesión es voluntario...(sé que al toro no le preguntan).....quizás esa valentía yo no la tengo.....tampoco que gustaría hablar del ambiente de "señoriítos" adinerados, ni el razonamiento machista que hay en ella... imagino que entra dentro de la "fiesta" y si la gente lo acepta allá ellos...creo incluso que como todo en la vida estas costumbres están cambiando, pero todavía hay toreros que ejercen o que ya están jubilados que siguen estirados y mirando por encima del hombro como si tuvieran grabado en la frente la palabra valor, chulo, y mujeriego....!!hay que ser gilipollas!! y retrogrado.
Después de esta entrada atacando por banderillas a este gremio y para que me posicionéis desde el primer momento me pongo de frente, es decir a puerta gayola, vais a necesitar dosis de paciencia si me queréis entender, porque explicar esto es verdaderamente complicado ...por eso y porque creo que tengo voz me intentare adelantar a lo que piensa un Anti-taurino.... hablar de Toros es hablar de nuestro origen. Lo único que os pido es que seáis sinceros con vosotros mismos como los voy a ser yo, no pretendo cambiaros de opinión, solo ver de otro color las cosas. El que suscribe manifiesta que le gustan los toros de una forma moderada, que va a la plaza de las Ventas a verlos de vez en cuando y que no os puedo decir otra cosa que la cultura torera me llama la atención. Os puedo decir en general que mi interés va enfocado normalmente desde una visión sociológica, aunque no haya estudiado para ello, es decir, las vestiduras de un torero y su cuadrilla, lo que se mueve de cualquier profesional de la plaza, como lo vive el aficionado, el calor y color de la tarde en medio de la tradición y porque nó, vamos a ser claros, las reacciones del propio toro desde que vive en los toriles hasta que muere.
Dicho todo esto, con todos mis argumentos y muchos que me faltarán, os doy mi opinión como os prometí sobre la tortura y muerte del toro y sin vacilaros confirmo en este sentido que tenéis razón...el toro muere y sufre, pero siento deciros que cambiar a las personas y al mundo en el sentido tan ecológico y de vida que queréis y anheláis, no pasa ni de cerca en empezar a prohibir los toros ni sus manifestaciones.-