"La necesidad marca el camino y es la que está haciendo que parte de nuestras ideas queden a la orilla" (Cristóbal Montoro)
Por mucho que se esforzó el Catedrático de Economía no consiguió que los espectadores de su discurso pusieran su mejilla en la instantánea de la mañana.
Ningún partido político le tendió la mano a la cara de Mariano en el peor día de su trayectoria. Con 180 diputados a favor, 100 votos en contra y 4 abstenciones; el buque insignia de los recortes fue convalidado entre abucheos y reproches de una crónica anunciada.
Las voces de Rubalcaba cambiaron los timbres apacibles del ayer por los ladridos del dóberman de de Felipe. La Rosa de primavera ha cambiado los colores llamativos por las espinas de su sequía
Las declaraciones de Cristóbal: "la necesidad marca el camino y es lo que está haciendo que parte de nuestras ideas queden a la orilla" no podían escapar de los gritos de la Crítica. Son precisamente los hechos y no las ideas los que han quedado sin muelle en los puertos de Mariano. La coherencia ideológica de la derecha entre sus políticas de recortes y su credo neoliberal es la principal diferencia entre los recortes de Zapatero y las tácticas del presente.
A la orilla de los leones – entre vallas azules y cinturones policiales – han quedado millones de parados, funcionarios, pensionistas y consumidores.
Millones de débiles que solamente cuentan con el color de sus camisetas y la lona de sus pancartas para decir NO a los recortes de Mariano. En la otra orilla, cientos de pescadores lanzan sus cañas de oro para pescar peces gordos en los océanos de Bankia.
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