Sin escape

Publicado el 13 septiembre 2017 por Carlosgu82

Por más que se trate de poner en un rincón, esa nube negra sigue danzando alegremente en torno a ti. ¿Habrá manera alguna de ahogarla en el agua? Tu cuerpo todavía puede sentir esa sacudida que le ha quitado el sueño durante tiempo. Sonríe, si quieres, una y un millón de veces. Cúbrete la cara con maquillaje hasta que no puedas respirar. Diles a los demás lo que quieren oír, al final, no les importa saber la verdad. Pero al final, esa oscuridad  alcanzará tus pasos. Para soñar con un día poderte librar de ella, tienes que cambiar desde adentro. No, no es tarea fácil, y nadie dijo que así lo fuera. Toma valor, y atrévete a entrar a esa zona de la mente que pocos pueden ver frente a frente. Tú y esa sombra, al final, son parte de lo mismo.

El día negro ha llegado, y no hay plegaria que valga para detenerlo. Simplemente, cierra los ojos y ya no trates de escapar de aquello que se ha escrito desde lo alto. No tiene utilidad alguna resistirte a la sacudida. Relaja tu cuerpo y entrégate por completo al vacío. ¿A quién le importan las lágrimas derramadas?¿Quién te ha visto durante esas oscuras horas del día? Tú sabes la verdad, y por mucho que te duela, sabes que ya no la puedes ocultar. La luz del día se está disolviendo lentamente. Es hora de las sombras.

Por mucho que el sol se desespere por brillar de nuevo, ya no hay mucho por hacer. Una lágrima se queda perdida en el fondo de la laguna. Tal vez, mañana haya una oportunidad para sanar por completo. Sin embargo, por el día de hoy, vale la pena dejarlo todo como está. Hay fantasmas, que jamás deberían volver a ver la luz del sol.