Sin rodeos
Año:
2018
Fecha de estreno:
2 de Marzo de 2018
Duración:
87 min.
País:
España
Director:
Santiago Segura
Reparto:
Maribel Verdú, David Guapo, Diego Martín, Cristina Castaño, Candela Peña, Toni Acosta, Cristina Pedroche
Distribuidora:
A Contracorriente Films
Hubo un tiempo en el que el humor de Santiago Segura sacudió a España. A comienzos de los años noventa, el prometedor cineasta Álex de la Iglesia, avalado por los hermanos Almodóvar, incorporó al reparto de su alocada ópera prima, Acción mutante, a otro debutante en la gran pantalla. Dos años más tarde, el director vasco contó de nuevo con Segura en la oscura y excelente El día de la bestia, todo un título de culto de nuestro cine, que terminaría de consolidar la carrera del actor en roles imprevisibles. Al mismo tiempo, Segura desarrollaba su filmografía como director con cortometrajes que traumatizarían a más de un niño, y en 1998 aprovechó una oportunidad inigualable para dirigir un largometraje: Torrente, el brazo tonto de la ley. Aquel retrato de la España cañí, plagado de frases que quedarían para el recuerdo, supuso el inicio de una exitosa franquicia -una rareza en el cine español-. Con cada nueva entrega se hacía evidente que la irreverencia daba paso a la repetición, pero Segura se encontraba muy cómodo en ese ambiente, por lo que nunca dirigió una película que no estuviera protagonizada por su agente. Hasta ahora.
Sin rodeos es el nuevo trabajo de Segura tras las cámaras. Una comedia no tan excesiva como las cinco entregas de Torrente, sino más cercana a la cotidianeidad y a un humor más genérico, que no se aleja demasiado del resto de comedias que producen las televisiones privadas hoy en día. Para intensificar el cambio de tercio, al menos aparentemente, pasamos de seguir a un machirulo de raza como Torrente a una mujer con los pies en la tierra, al borde de sufrir más de una úlcera por reprimir tanto sus frustraciones. Desde el primer momento vemos que la vida de Paz (Maribel Verdú) no es precisamente idílica: su novio pasa de todo, su mejor amiga está más atenta del móvil que de escuchar sus dramas, su jefe es un capullo y un machista y encima Candela Peña le dedica una peineta cuando le corta el paso en medio del tráfico. Todos esos ingredientes explosivos se van combinando durante la primera mitad de la película, muy calmada -demasiado, de hecho- y de un humor mucho más blanco que el de la segunda parte, cuando todo se desboca y se presentan situaciones más comprometidas y llamativas.
A lo largo de la película se plantea una crítica evidente a la dependencia de la sociedad actual a las redes sociales y se habla de sexismo sin tapujos, pero recurriendo a los típicos chistes y frases que poco tienen de sutiles o elaborados. Como es habitual en el cine de Segura, la furtiva aparición de “amiguetes” (Cañita Brava, El Gran Wyoming, Florentino Fernández…) en el transcurso de la cinta está asegurada, lo cual no aporta nada realmente a la trama, ya que son pegotes incrustados para agradar al público más disperso. En definitiva, Sin rodeos es una comedia que carece de un toque ácido o mordaz, pero con algún que otro momento que todos soñamos con materializar.