Sin salida. Pamela Clare

Publicado el 25 febrero 2013 por Marijo

Título original: Breaking Point

Editorial original: Berkley / Mayo 2011

ISBN original: 0-425-24051-7

Editorial: Ediciones Pàmies, Phoebe / Enero 2013

Género: Suspense / Thriller

A pesar de no tener motivos para continuar adelante desde que el huracán Katrina le arrebató a sus seres queridos, Natalie Benoit se da cuenta de lo mucho que ama la vida cuando, en el transcurso de un viaje organizado por la Asociación de Periodistas, es secuestrada por los Zetas, un cártel mexicano relacionado con el narcotráfico y la muerte de mujeres en Ciudad Juárez.

Zach McBride arriesga su vida todos los días; su trabajo para el Gobierno consiste en atrapar a los criminales que operan a ambos lados de la frontera entre Estados Unidos y México. Pero es traicionado, y termina en manos de los Zetas que, convencidos de que les ha robado un alijo de droga, comienzan a torturarle brutalmente.

Cautivos de los Zetas, el destino hará que Zach y Natalie se vean obligados a aunar sus fuerzas: primero para escapar, y después para desentrañar una red de narcotráfico y blanqueo de dinero que afecta a importantes personalidades, tanto en México como en Estados Unidos.

¿Serán capaces de hacerlo sin sucumbir a la incontenible pasión que surge entre ellos? ¿Conseguirán superar no sólo a sus perseguidores, sino también aquellos miedos que les obligan a llevar una existencia a medias?

El otro día, hablando con un compañero, me comentaba que había tenido que escribir un mail que nunca hubiera querido escribir. No he podido dejar de acordarme de él porque en este momento yo me encuentro, justo... ¡en la situación contraria! Me explico: quiero escribir mi opinión de este libro. Deseo, necesito hacerlo, el único problema es que no sé por dónde empezar. Es tal el cúmulo de sentimientos que ha provocado en mí que me cuesta coger al vuelo una de las ideas que ronda mi cabeza; elegir cuál de ellas es la indicada para tirar de ese hilo y expresar todo lo que me ha hecho vivir.

Sin duda hay diferentes clases de libros. Los hay que te presentan poco a poco a los protagonistas pero, sí, lo habéis adivinado, no es el caso de este. A Natalie la conocemos ya desde hace algunas entregas de la serie Equipo I, y a Zach nos lo topamos de golpe. Literalmente, porque cuando lo hacemos están torturándole de una manera brutal. Este dato ya nos da idea de la intensidad de la novela: empieza de manera frenética y no baja el ritmo en ningún momento -algo que por otro lado suele ser habitual en las novelas de Pamela Clare y marca de la casa en cuanto a su estilo narrativo-.

Volviendo a Zach y Natalie, hay que decir que son dos personas atormentadas que pasan por la vida de puntillas sin disfrutar de lo que les rodea. Ambos han canalizado toda su pasión, entregándose por completo a su trabajo; ella es periodista, él -antiguo SEAL y ahora DUSM- un agente que realiza misiones como infiltrado en México. En un México que no es precisamente el que disfrutan los turistas que van a Acapulco, sino el México más salvaje, mafioso y violento que existe; el que es el pan nuestro de cada día en Ciudad Juárez.

Es justo en este país donde Zach y Natalie se conocen, de una manera muy poco convencional. Ella tiene la desgracia de viajar en un autobús de periodistas cuando este es atacado por los Zetas, una salvaje banda de narcotraficantes que mata, saquea, secuestra y, sobre todo, trafica con drogas. Y bueno, como suponéis, ella ve cómo matan y saquean para, después, ser secuestrada... La otra parte le toca a Zach, que se ha infiltrado como traficante de drogas y los Zetas piensan que les ha robado un alijo de coca. Ambos acaban en la ilegal prisión que los Zetas tienen en mitad del desierto.

Es imposible permanecer indiferente ante el cúmulo de escenas que se suceden en esa cárcel. Las hay de todo tipo. Algunas son escalofriantes, como cuando conectan a Zach a la batería de un camión para torturarle con descargas eléctricas; otras tiernas, inolvidable el momento en que a él le quitan la venda de los ojos y ve a Natalie por primera vez -piensa que ella es un ángel... y Ángel la llama a partir de ese instante-; muchas son brutales, como todos los enfrentamientos que tienen con los Zetas hasta que logran escapar; pero, por lo menos a mí, ninguna me dejó indiferente. Y, además, es gracias a todos esos peligros que deben superar por lo que Zach y Natalie encuentran la manera de dar sentido a su vida. Gracias a esas intensas sensaciones se dan cuenta de que quieren vivir plenamente, de cómo quieren hacerlo y de que en la vida vale la pena arriesgarse si es para encontrar lo que ellos encuentran al final.

Sin duda podría describir una de esas escenas tras otra, todas ellas redondas, inolvidables y, sobre todo, imprescindibles para llegar al final del libro y que todo quede atado, y bien atado, como suele ocurrir en todos las novelas de Pamela Clare. Pero no lo voy a hacer. Solo voy a añadir que es una joyita, de esas que dentro de cinco años la gente se morirá por conseguir y estará agotada, como ocurre ahora con los primeros ejemplares de la saga.

Detrás del estilo narrativo engañosamente sencillo de Pamela Clare, encontramos sólidas descripciones, diálogos divertidos y pensamientos personales que nos aclaran un montón de cosas; recurso al que la autora recurre en todos sus libros, contarnos los pensamientos de sus personajes para hacernos cómplices de ellos y atraparnos de esa manera todavía un poco más.

Según abráis las páginas de esta novela encontraréis de todo, aventura, ternura, romance, peligro, malos de verdad y protagonistas imperfectos, así como escenas de amistad inquebrantable (brutal la escena, al final, cuando hieren a Darcangelo y Hunter le atiende). Pero lo más importante es que cuando paséis la última página, habréis disfrutado como nunca, os habréis evadido del mundo durante unas horas y querréis más... ¡Más libros de Pamela Clare!