“Síndrome de Bournot”, odio a tu trabajo

Publicado el 15 diciembre 2016 por Carlosgu82

“SINDROME DE BOURNOT”

El llamado “Síndrome de Bournot”  fue descubierto por el médico psiquiatra  Herbert Freudenberger en el año 1974 y sintéticamente significa:  odio al trabajo.

Si no puedes estar más de media hora en tu oficina, te encuentras de malhumor y todo te parece irrelevante, es muy posible que lo padezcas.

La sensación de este Síndrome es el hartazgo, el estar cansado y superado por las situaciones laborales. Es una forma paulatina de perder sentido al trabajo que sienten las personas y que incluso puede llevar a que sus vidas corran peligro.

Te sientes cansado y tu nivel de estrés está en el máximo, se desencadenan malestares estomacales, dolores de cabeza.

El prestigioso médico hace una clasificación de este Síndrome en tres etapas;

1 – Cansancio emocional: Te encuentras en la etapa de la indiferencia ante las demás personas, totalmente deshumanizado, miras a la gente con empatía y no cumples con tu trabajo, todo te parece carecer de sentido.

2 – Falta de iniciativa laboral: Pasas por una situación negativa y no encuentra el rumbo, estás perdido como un zombie, eres totalmente pesimista.

3 – Falta de realización Personal: Es la etapa del “no puedo”, a todo lo tildas de negativo como que no puedes realizarlo o que te saldrá mal.

Logicamente que todos alguna vez nos sentimos aburridos, pero cuando esto se convierte en habitual sintiendo sensaciones de : Agotamiento, fatiga, pérdida de interés, dolores de cabeza y sueño, es cuando se comienzan a precipitar los síntomas del síndrome.

Cómo terminar con este síntoma:

Cómo siempre dicen los médicos, es mejor prevenir que curar, para lo cuál toma en cuenta lo siguiente:

  • No lleves trabajo a tu casa, trata de realizarlo en tu oficina o lugar donde habitualmente lo llevas a cabo.
  • No te inmiscuyas en otros asuntos que no te incumben.
  • Fíjate una meta realizable.
  • Aléjate de la rutina, encuentra distintos modos de hacer lo mismo.
  • Trata de ver a la vida como algo con sentido orientado hacia el éxito personal.

Si cumples con estas premisas, probablemente te alejes del fastidioso síndrome.