Sobre la corrida de Bohórquez en Las Ventas

Por Malagatoro

Menudo petardo de corrida en Madrid, donde la única ovación unánime de la tarde fue para Florito. Ha sido una máxima del toreo que cuando hay toros no hay toreros y viceversa; pues ayer en el ruedo de Las Ventas no hubo ni toros ni toreros. Abellán querido en Madrid y nunca he sabido el por qué, a no ser por aquello del paisanaje, estuvo como siempre en vulgar pega pases, soso, abúlico, desganado. Sí fue destacable y meritoria su estocada al primero de la tarde en la suerte de recibir. Saldivar anduvo más decidido y algo vistoso en el toreo accesorio, pero no acaba de dar el paso para delante. Desde su actuación en Madrid el año pasado le he visto en varias ocasiones y cada vez le veo peor y ventajista. Pero lo que no se concibe es el petardo propinado por Víctor Barrio, que parece que viene de vuelta en la profesión y que nos enjaretó sendas sesiones de mantazos y toreo ventajista, dejándose ir con las orejas puesta al sexto, el mejor de una corrida más propia para rejones, descastada, floja, con ejemplares inválidos y gatunos, aunque noble. Los aficionados, los poco que quedan en Madrid, debieran organizarse en un movimiento a lo 15 M en las inmediaciones de Las Ventas con el lema: “Por la vuelta del toro, el toreo y la integridad de la Fiesta”.  Foto: Juan Pelegrín/Las Ventas


Angel Arranz en “Recortes y galleos”:

“Lo del “baile” de los corrales en la primera plaza del mundo es, o casi, de juzgado de guardia. Anuncian unos toros y salen otros. Abunda el ganado morucho –pseudo-bravo- tanto en las ganaderías titulares como en las “reservas”. Y si esto lo consentimos en la cátedra del toreo, en casi todos los demás cosos es, o será, un coladero.

Los toreros y los toreos son siempre, siempre, derivados de los toros. Es decir, con toros bravos hay toreros y toreos bravos y con toros raros hay toreros y toreos raros. Y no hay, o hay escasa, autocrítica en los que manejan el montaje pseudo-taurino.

O recuperamos el carácter, la bravura, el temperamento y los encastes auténticos, o la prima de riesgo nos manda casi al olvido. Allá cada cual con su responsabilidad y conciencia.”

Antonio Lorca en El País:

“¿Por qué si desde hace años se utilizan para los espectáculos de rejoneo, se les anuncia en plena feria de San Isidro en corrida de a pie? ¿Qué méritos pueden aportar? Si, en general, no lucían presentación ni belleza, y, encima, estaban inválidos y ayunos de calidad. ¿Acaso es que son más baratos? Misterio de los taurinos.

¿Por qué el presidente del festejo se empecina en mantener en el ruedo al quinto de la tarde, un sobrero completamente inválido, y le hace la pascua al público, y al propio torero, en este caso el mexicano Saldívar, al que le hurtó una oportunidad de triunfo? Misterio de la autoridad…

…Una pregunta final: ¿por qué todos los toreros son tan ventajistas? Misterio de la modernidad.”

Enrique Martín en Opinión y Toros

“Mes de mayo, el mes de las flores, el buen tiempo y el sol ya tomando fuerza, buenas amistades con quien mantener una charla animada, ¿qué más se puede pedir para pasar una buena tarde? Pues depende Si estás en un parque, con tu césped, tu sombrita y unos bancos, pues la guinda será una buena merienda. Pero si cambiamos el parque por una plaza de toros, la de Las Ventas, por poner una al azar, entonces ni la merienda lo arregla. Ya pueden ser ricos canapés, jugosa tortilla o pastelitos de hojaldre, que si por medio andan los toros de don Fermín Bohórquez, la reunión parecerá la sala de espera para hacer curas de sueño. ¡Qué sopor niño! Tú que estás tan feliz, que ves salir al torete y es dar los primeros pasos y los consiguientes tropezones y ya entras en plena depresión. Esto no lo arregla ni todo el gremio de psicólogos, psiquiatras y médicos naturistas de la Tele Tienda.

Un cartel que bueno, no era el más indicado para llamar a los revisteros a acudir a la plaza, los de Bohórquez por los de Manolo González, Miguel Abellán, Arturo Saldívar y Víctor Barrio. Y aquí el candidato a optimista del año que se pone como todas las tardes, dispuesto a rescatar un momento que le inspire y  que le haga sentir la necesidad de dibujarlo. ¡Váyase usted por ahí hombre! Si es más fácil recitar de corrido los gobiernos de Grecia e Italia de un año a esta parte, acompañados de los planes económicos para no ser rescatados. Si es que uno se pone a dibujar un intento de natural y el toro está tan parado que está posando para uno. Y luego vas tú y dices eso de “vamos a darle sensación de movimiento”. Si es que parece que me han dado una pedrada en la coronilla.”