Sobre las afinidades literarias y el concepto de generación

En España, desde que Gabriel Maura bautizara a los literatos de su época como "generación del 98" (lo cuenta Gómez de la Serna en su biografía de Valle-Inclán), se ha repetido lo de nombrar a los literatos de determinada época como "generación"; generación del 98, del 14, del 27, del 36, del 50, del 70 o Novísimos... Muchos tenden a ver estas generaciones más allá de lo cronológico, a ver afinidades literarias entre ellos. Es evidente que puede haberlas, por el mero hecho de respirar todos un mismo ambiente cultural, una misma época, aunque también grandes diferencias, debidas a los gustos de cada cual, a su formación lectora. En literatura yo entiendo "generación" desde un punto de vista meramente cronológico, pues en literatura las afinidades trascienden tiempo, nacionalidades, todo. ¿A quién se parece Chejov? A Raymond Carver, a Arthur Miller... escritores que nacieron en otro país años después de que Chejov muriera. O más bien habría que decir que Carver y Miller se parecen a Chejov, pues fueron estos quienes aprendieron de él. ¿A quién se parece Borges? A Bioy Casares, contemporáneo, compatriota y amigo suyo le unen muchas cosas, literariamente, pero yo le veo igual de afín, literariamente, o tal vez más afín incluso, a Marcel Schwob, el autor de "Vidas imaginarias", francés que murió cuando Borges sólo era un niño.