Sobre las tarjetas de la ORA

Publicado el 02 julio 2013 por Jangas

Uno de los aspectos más importantes de la política es la ética, distinguir entre aquello que está bien y lo que está mal. La dinámica institucional plantea pocos cauces de debate más allá de los partidos, la política como ética es donde se pueden establecer puentes que profundicen en la democracia.

El tema de las tarjetas de la ORA escapaba al control democrático, no se había hablado en ningún órgano municipal y se había establecido una forma viciada de funcionamiento que permitía que determinadas personas, que tenían que dar ejemplo, entre los que estaban concejales y ciudadanos, tuvieran una tarjeta que les eximía del pago de la ORA, lo cual contradecía la normativa. ¿Cómo se puede hablar de garantizar la justicia fiscal o qué la ciudadanía se haga responsable de los pagos que tiene que realizar por las dificultades que tiene una Institución cuándo quienes tienen que dar ejemplo se saltan la norma en su propio beneficio?

Desde luego negando su existencia no es la mejor forma de que se puedan cambiar las cosas: en unos casos por desconocimiento y en otros casos por intentar ocultar un funcionamiento deficitario y corrupto del sistema de aparcamiento en la ORA.

Cuando el funcionamiento es deficitario hay que cambiarlo sin excusas: si ya se hacía cuando gobernaba el PSOE, si Izquierda Unida actúa de mala fe, … La transparencia es fundamental para cualquier institución, la gente tiene que saber qué ocurre dentro del Ayuntamiento, porque si cuando algo se conoce hay que cambiarlo es que estaba funcionando mal.