Este es uno de esos platos que te inventas sobre la marcha y se convierte en el preferido de toda la familia.
Las especias le aportan un sabor exquisito, una receta sencilla que se transforma en un sabroso regalo para tu paladar.
Al principio consistía en un sofrito de pollo con especias, hasta que un día vi una receta de Jamie Oliver muy parecida con miel y sésamo y me encantó, así que no dudé en agregárselo a este delicioso pollo. El resultado, increíble.
INGREDIENTES
1 Pollo troceado
1 Cucharaditata de cúrcuma1 Cucharadita de gengibre molido
o si lo prefieres gengibre fresco rallado
Pimienta negra según gusto
1/2 Cucharadita de comino
1 cucharadita de cilantro troceado
1 y 1/2 cucharaditas de perejil troceado
1 Cebolla troceada
6 dientes de ajos laminados
sal y aceite de oliva
2 cucharadas de sésamo tostado
2 cucharadas de miel
PREPARACIÓN
Limpiamos bien el pollo y le hacemos unos cortes
Agregamos las especias (cúrcuma, gengibre, comino, pimienta negra) sal, perejil, cilantro, el ajo y abundante aceite de oliva
Mezclamos bien y lo echamos a la sartén.
Dejar cocer primero a fuego medio, cuando esté dorado le damos la vuelta y le añadimos la cebolla troceada y dejamos cocer a fuego lento dándole vueltas de vez en cuando hasta que se haga.Por último añadimos la miel y el sésamo tostado
Lo dejamos 5 minutos más y listo.
Que lo disfrutéis si os animáis a hacerlo