La quinta iteración del Índice de Consumo de Movilidad (MCI) de EY, una encuesta global de casi 20.000 consumidores de 28 países, encontró que a pesar del interés récord de los consumidores estadounidenses en los vehículos eléctricos (EV) en 2023, solo el 34% de los consumidores estadounidenses tienen la intención de comprar un vehículo eléctrico como su próximo automóvil en 2024. Esto marca una disminución de 14 puntos desde los hallazgos del MCI de 2023, lo que demuestra que la educación sobre vehículos eléctricos no está donde debe estar y las barreras para la adopción masiva de vehículos eléctricos. todavía existe.
"Si bien hemos visto aumentos sustanciales en el interés y la compra de vehículos eléctricos desde 2020, el MCI de este año muestra caídas en la demanda por primera vez", dijo Steve Patton , líder automotriz de EY Americas. "Esta disminución se debe en parte a la falta de educación del consumidor sobre el valor a largo plazo de un vehículo eléctrico y los requisitos de mantenimiento en comparación con los vehículos ICE (motor de combustión interna) tradicionales".
Aumenta la confianza del consumidor en la infraestructura, pero las preocupaciones sobre el mantenimiento y el valor de la batería no son suficientes
En el último año, la confianza de los consumidores tanto en la autonomía de los vehículos eléctricos como en la infraestructura de carga ha aumentado, debido en gran parte a la colaboración intersectorial y a las inversiones tanto en educación como en estaciones de carga. En 2023, los hallazgos de MCI revelaron que el 30% de los compradores de automóviles estadounidenses estaban preocupados por la autonomía limitada de los vehículos eléctricos. Este año, sólo el 24% de los compradores de automóviles estadounidenses sintieron que la gama limitada de vehículos eléctricos era una de sus principales preocupaciones. Es más, la falta de estaciones de carga es menos preocupante que antes. En 2022, MCI señaló que el 34% de los compradores estadounidenses estaban preocupados por encontrar estaciones de carga; esa cifra fue del 23% en 2024, lo que representa una disminución de 11 puntos porcentuales.
Dicho esto, la confianza en la autonomía de los vehículos eléctricos y la infraestructura de carga se ha visto eclipsada últimamente por las crecientes preocupaciones de los consumidores estadounidenses sobre la duración de la batería y las tarifas de mantenimiento. El costoso reemplazo de la batería fue el principal factor disuasivo para los consumidores estadounidenses a la hora de comprar un vehículo eléctrico, superando por primera vez la falta de estaciones de carga. Esto es especialmente cierto para los potenciales compradores de vehículos eléctricos por primera vez, ya que el 27% expresó preocupación por las costosas baterías en comparación con el 23% de los propietarios actuales de vehículos eléctricos.
"Durante los últimos cinco años, hemos visto un enorme progreso en la reducción de las barreras para la adopción de vehículos eléctricos, desde frenar las preocupaciones sobre confiabilidad y accesibilidad hasta inculcar confianza en la carga entre los consumidores estadounidenses", dijo Marc Coltelli , líder de movilidad eléctrica y servicios públicos de EY Americas. "Para mantener el impulso y hacer que la propiedad de un vehículo eléctrico sea atractiva, es imperativo educar y crear una experiencia perfecta para el cliente desde el concesionario hasta el punto de carga, a lo largo de todo el ecosistema y el ciclo de vida de un vehículo eléctrico. Ahora, los consumidores estadounidenses están expresando una mayor preocupación por el mantenimiento y el reemplazo de la batería. costos, cuando en realidad cuesta menos mantener un EV en comparación con los vehículos ICE".
Los vehículos híbridos demuestran que puede ser necesario un puente de transición
Si bien la demanda de vehículos eléctricos ha disminuido, curiosamente, los vehículos híbridos han ganado popularidad. En 2024, la proporción de consumidores estadounidenses que tenían la intención de comprar un vehículo híbrido como su próximo automóvil aumentó 2 puntos porcentuales, en comparación con el promedio mundial, que disminuyó 2 puntos en general.
Este aumento puede atribuirse a la versatilidad general de los vehículos híbridos. De hecho, el 21% de los consumidores estadounidenses dicen que prefieren una transición gradual de un vehículo ICE a un vehículo totalmente eléctrico. Es más, al 26% de los compradores estadounidenses les gusta la seguridad que viene con un motor híbrido (en comparación con sólo el 19% de los encuestados a nivel mundial). Esto demuestra que la opcionalidad es clave, y los híbridos están reemplazando a los vehículos eléctricos como un vehículo puente para aquellos interesados pero que aún no están dispuestos a renunciar a la comodidad de poseer un ICE.
"No sorprende que los vehículos híbridos estén ganando popularidad, especialmente porque muchos compradores potenciales de vehículos eléctricos señalan las preocupaciones ambientales como su motivación para comprar", dijo Raman Ram , líder aeroespacial, de defensa y de movilidad de EY Americas. "Como muchos todavía dudan en apostar por los vehículos eléctricos, los híbridos ofrecen una solución 'más fácil de aceptar': la seguridad del ICE con los avances de la tecnología y el rendimiento de los vehículos eléctricos. Para aquellos que buscan hacer una transición debido al medio ambiente, los híbridos "Permite a los propietarios reducir su dependencia del combustible y crea opciones para baterías y repuestos. Para muchos, es beneficioso para todos".
Los vehículos eléctricos lideran el futuro de la conducción basada en la tecnología
A pesar de la disminución de la demanda, los fabricantes de automóviles han utilizado durante mucho tiempo los vehículos eléctricos en la transición hacia vehículos más conectados. Y ahora, como líderes indiscutibles en la conducción basada en la tecnología, los consumidores estadounidenses esperan que los vehículos eléctricos tengan opciones de servicios conectados. Para la mayoría (57%) de los consumidores estadounidenses, las funciones de navegación son la característica principal utilizada al conectar un automóvil a Internet, y otro 45% pagaría por servicios de navegación, lo que demuestra que la habilitación tecnológica se ha convertido en una necesidad básica para los potenciales compradores de automóviles. Otra necesidad de la mayoría (56%) de los consumidores estadounidenses son las medidas de seguridad, mientras que casi la mitad (46%) utilizaría servicios conectados para solicitudes de mantenimiento y actualizaciones de servicios.
Sin embargo, los propietarios de vehículos eléctricos sí sienten problemas con la transición a los automóviles conectados. Casi la mitad (47%) señala que los altos precios de los servicios adicionales son preocupantes, y un 36% adicional señala que la mayoría de los servicios se pueden encontrar en sus teléfonos inteligentes.
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Sigue el canal de Valenciacars en WhatsApp: https://whatsapp.com/channel Así,que Solo el 34% de los consumidores estadounidenses que planean comprar un vehículo nuevo en los próximos 24 meses comprará un vehículo eléctrico
Si bien el camino para que los consumidores se vuelvan completamente eléctricos está lleno de obstáculos y a medida que la demanda fluye y refluye, la educación y la creación de opciones híbridas serán clave para el avance de la adopción masiva de vehículos eléctricos.