Los mayas eran geniales astrónomos y marcaron este solsticio como un final.
Los finales pueden ser de muchisimas cosas, lo único que tienen en común es abrir la posibilidad de cambio. Particularmente, me encantaría que ciertas cosas del mundo cambiaran. Que los mayas tengan razón y que comencemos otra etapa.
Y que si llega en algun momento un fin del mundo, "me pille bailando",disfrutando, sonriendo, ¡viviendo!
Bueno, feliz verano a todos y todas.
Gracias por seguir pasandose a leer.