Lo que debes saber al soñar con Egipcio.
Si eres uno de los afortunados que han visitado alguna vez Egipto o estás planeando un exótico viaje hacia esta extraordinaria tierra quizá has tenido sueños con Egipto. Soñar con Egipto es un sueño esplendoroso, increíble, también podría decirse que algo agotador de percibir, tanta belleza, tanto templo y tanta grandeza de construcción. Soñar con viajar a Egipto con unas aerolíneas importantes como Iberia, AirEuropa o a través de un fabuloso crucero con Pullmantur porque te gusta que te cuiden, que te mimen en el viaje y no sentir que se olvidan de tí en el asiento indicado. Todos sabemos que muchas personas tienen pánico a volar porque tenemos mucho respeto a los aviones (soñar con accidento de avión). Por eso necesitamos mimos especiales.
Mi sueño con Egipto y mi viaje.
Soñar con Egipto y Egipcios es soñar con un mundo diferente al que conoces. Egipto para mí era un sueño especial. Cuando estudiaba Historia del Arte deseaba adentrarme en el mundo egipcio. Me fascinaban las diapositivas que veía sobre el museo del Cairo: Joyas, objetos de oro, máscaras funerarias…Tutankamon…cajas mortuorias.¡Cuanta grandeza, cuanta Historia!
Soñar con estar en Egipto es estar preparado para abrir los ojos pues no quieres perderte nada de lo que vas a ver. Tienes que estar preparado para madrugar y visitar el templo de Luxor, maravilla maravillosa. Esos gigantes de Memnon casi en medio de la nada.¿Y los valles? El valle de la Reina y el valle de los Reyes, te quedas sin habla, cuando intentas guardar en la retina todo lo que ves. Hay grandeza, pero también mucha miseria; sus gentes tan amables te suelen llamar ¡María!.
Sueñas con Egipto porque es la ilusión de tu vida, esos niños que salen de todos lados y siempre te piden – ¡1 Euro, dame 1 Euro, María!-.Nunca lo olvidas.
Cuando sigues conociendo y viendo otros templos, el templo de Karnak, majestuoso, con esas monumentales columnas, intentas recordar aquellas diapositivas que me ponían en otro tiempo, pero desde luego es mejor vivirlo y patear cada uno de sus rincones en primera persona. Nos queda mucho por soñar, nos queda mucho por ver, pues aún te queda un As en la manga: Abu Simbel. El templo fue construido por Ramses II. Lo tremendo de este maravilloso complejo fue que en 1968 fue reubicado en otro lugar, piedra a piedra. Fue necesario para evitar que quedara sumergido tras la construcción de la presa Asuán. Un poco de historia nunca viene mal.
Soñar con ir a Egipto es imaginar y probablemente realizar una excursión en camello hacia un poblado Nubio. Conocer su gente y sus costumbres. Te ofrecen pastas y té. Casi no lo crees pues parece un sueño, un sueño como en un cuento. Igual sueñas con estar en Egipto para poder ver las pirámides de Gizé. Otra vez nos quedamos mudos ante semejante obra faraónica. La vista desde la gran Esfinge es impresionante, fotos y mas fotos para el recuerdo si alguien no va a visitar Egipto. Parece mentira que Napoleón contemplara la gran Esfinge, semienterrada por las arenas del desierto.
Soñar con ir a Egipto en mi caso se hizo realidad. He aprendido y apreciado el Arte. Ha sido un sueño cultural. Ojala mañana tenga otro sueño de este estilo, en el cual aprenda y aprecie diferentes lugares y culturas. Quiero seguir soñando.