Sopa de cebolla inglesa

Por Recetariodelady @recetariodelady
Últimamente amenizamos nuestros desayunos de fin de semana viendo algún capítulo del programa "Veterinario al rescate" o, si ya lo hemos visto, nos ponemos cualquier programa de cocina que tengamos grabado... Sí, pasamos tantas horas fuera de casa entre semana que nos tenemos que grabar los programas que nos gustan jeje.

Total, que el día que nos toca alguno de cocina, nuestra cocina tiembla. Desde el desayuno comenzamos a maquinar ideas para preparar una comida "chula", porque en esos momentos cualquier receta que aparece en la pantalla nos parece mucho mejor que lo que teníamos pensado hacer para comer...
Otras veces me da por sacar mis libros de cocina y revisarlos enteritos por que, además de que me encanta ver las fotos tan chulas que tienen, me suena haber visto en el programa una receta que me ha recordado a otra que tenía pendiente hacer...

Y la última posibilidad es que yo elija una receta de entre mis libros y mi cocinillas mejore la oferta diciendo que le suena que Jamie Oliver tiene una receta parecida... Y ya sabéis que cuando oigo ese nombre me olvido de todo lo demás. Serán manías, pero todas las recetas que hemos probado de este hombre nos han salido fenomenal. 
Así que de una simple sopa de cebolla que yo había elegido, pasamos a ésta acompañada de una rebanada de pan con queso al estilo inglés, con la que casi me da algo tras la primera cucharada. Jamás pensé que una sopa de cebolla pudiera estar tan buena.

Y es que romper la rebanada de pan llenita de queso para llegar a la sopa es una auténtica delicia que cuando te la llevas a la boca se multiplica por diez gracias a la rica combinación de sabores. Te encuentras unas cebollas suaves, un toque de puerro, el queso gratinado junto con el pan bien mojado en el caldo de pollo... Y de repente un toque inesperado de hierbabuena... uff!!!
En la receta original utiliza salvia, pero como no la encontramos nos decantamos por la hierbabuena que siempre queda rica en las sopas, aunque no me atreví a cocerla con el caldo por si luego sabía demasiado...
 Ingredientes (para 4 personas)
  • 2 cebollas moradas
  • 2 cebollas blancas
  • 2 ajos
  • 1 puerro grande
  • 1 litro de caldo de pollo
  • Sal y pimienta
  • Aceite de oliva 
  • 2 rebanadas de un pan redondo, a ser posible del día de antes
  • Queso tierno
  • Unas hojas de hierbabuena
  • Salsa Worcestershire
 Preparación
Las medidas para calcular los ingredientes de esta sopa es bastante fácil: por cada kilo de verdura necesitarás el doble de caldo. En nuestro caso las cebollas y el puerro pesaron medio kilo, así que utilizamos 1 litro de caldo. Comenzamos pelando y cortando en rodajas finas las cebollas, el puerro y los ajos. Tras un rato cortando y unas cuantas lágrimas, tendréis los ingredientes preparados ;).

En una olla a fuego medio vierte un buen chorro de aceite hasta cubrir el fondo. Una vez que el aceite ya esté caliente, añade los ajos.

Cuando los ajos comiencen a coger un color dorado, añade las cebollas y el puerro, salpimienta y remueve.

Tapa la olla y deja que se poche todo durante unos 25 minutos, hasta que todo esté completamente blando y tenga un tono dorado o transparente. No te olvides de remover de vez en cuando para que no se pegue.

Añade el caldo, remueve y deja que cueza unos 20 minutos más.

Rectifica de sal o pimienta si hiciera falta, y ya estará lista nuestra base de la sopa.
Enciende el horno con la opción de grill.
Corta un par de rebanadas de un dedo de ancho aproximadamente, ya que utilizaremos una para cada dos personas. Corta estas rebanadas por la mitad y cúbrelas con abundante queso rallado.

Coge unas hojas de hierbabuena, mézclalas con un poco de aceite de oliva y reserva. Reparte la sopa en unos cuencos aptos para el horno.  Coloca la rebanada de pan en el cuenco, sumergiendo uno de los extremos en la sopa. Ralla más queso por encima, hasta cubrir toda la superficie del cuenco, y añade unas gotas de salsa Worcestershire por la rebanada de pan. Por último, añade las hojas de hierbabuena.Mételo en el horno entre 1 y 2 minutos, hasta que el queso se haya gratinado.Antes de servir, vierte un chorro de aceite por encima del pan y, si quieres, un poco más de hierbabuena picada.