Delicado, refrescante, nutritivo, natural, exquisito y adictivo; son los calificativos que se me vienen a la cabeza para describir esta maravilla de postre. Un helado, sorbete o granizado siempre se agradece tras una comida copiosa en épocas de calor; o quizás a mitad de tarde como merienda... Sea la hora que sea, cuando decidas degustarlo, te dejará muy buen sabor de boca, tanto que quizá quieras repetir.
Considero que el toque de las hojitas de hierbabuena le dan un aire muy exótico y veraniego, a falta de 1 día para que este se estrene oficialmente.
- 400 grms de albaricoques.
- 75 grms de azúcar.
- 1 yogurt griego.
- 5 hojas de hierbabuena.
Preparación:
Pelaremos y cortaremos en trozos los albaricoques y los meteremos en un recipiente que irá al congelador por un periodo de 5 horas. Una vez pasado este tiempo lo meteremos en una batidora americana y le pondremos el resto de ingredientes y trituraremos. Volveremos a congelar durante 5 horas, removiendolo (con ayuda de un tenedor) cada hora y media. Finalmente rellenaremos una manga pastelera y serviremos, con ayuda de esta, los vasos en los que lo vayamos a degustar.
* Si queremos que quede más dulce no tenemos nada más que agregar un poco más de azúcar y listo. Probad la preparación (para comprobar el dulzor) antes de meterla en el congelador.