Soy creativo

Siempre que hablamos de las cualidades de un niño. Solemos hacer mucho hincapié en su creatividad. Una habilidad que se suele perder en la mayoría de personas con los años. En la creatividad de los niños influyen muchos factores, desde internos hasta externos. Hoy hablaremos de la fuerza y la importancia que tiene en las personas y cuales son los motivos por los que es una virtud que solo permanece en un grupo de personas.

¿Qué es la creatividad?

Muchas veces cuando escuchamos la palabra creatividad, pensamos en personas muy imaginativas. Con sueños, que ven cosas que los demás no ven. Y la verdad tiene algo que ver con ello. Según la real academia,

La creatividad es la capacidad para crear.

Es evidente, que ésta definición conlleva una serie de detalles más allá. Todo lo que una persona necesita para crear. Así por ejemplo, sin imaginación, una persona lo tendrá muy difícil para crear nada. Los adultos, solemos crear algo para cubrir una necesidad que hay en la sociedad. Y por desgracia, son muy pocos los trabajos donde es necesaria una buena dosis de creatividad. Lo que no quiere decir, que sería buena para cualquier trabajo.

La creatividad y los niños.

Como en todos los apartados de la vida. Cada niño responde a una serie de cualidades. Lo que quiere decir que no todos los niños son igual de creativos. Pero, hay un dato que si que podemos destacar. Aunque no todos sean iguales, si que es verdad que todos los niños tienen grandes dotes creativas. Y que el porcentaje de personas que se consideran creativas en la adultez, es mínimo. Con lo que nos damos cuenta, que es una virtud o cualidad que por algún motivo los seres humanos perdemos con los años.

¿Es necesaria en la infancia?

De hecho, el motivo de perderla, es que la creatividad, es algo muy necesario durante la infancia. Y según el sistema social que tenemos establecido. Donde nos dicen como y cuando pensar. La creatividad, es un lastre en nuestra sociedad. No para la persona como individuo, sino para el que marca las normas. La creatividad, es uno de los pilares del pensamiento individual y de cuestionarnos todo. Con lo que en los sistemas educativos de prácticamente todo el mundo. Adrede o no, se encargan de ir eliminando todo lo que puedan de nuestro pensamiento creativo. Para los de arriba, todo es más fácil cuando el ciudadano deja de pensar y comienza a asumir lo que se le dice o impone.

Durante los primeros años de nuestras vidas. Estamos en un proceso de aprendizaje diferente al que tendremos en el colegio. En la primera etapa, lo que tenemos que aprender, necesita una parte importante de creatividad. Estamos descubriendo no solo el mundo y a los demás, sino a también nosotros mismos. Además el aprendizaje no es algo pesado, sino divertido, ya que todo lo que aprendemos de niños, se hace a través del juego.

Será creando nuevos mundos en nuestra cabeza, cuando tengamos que pensar como solucionar los problemas que nosotros mismos nos hemos marcado. Debemos aprender a hablar, a andar, a relacionarnos, a ser nosotros mismos. Pero lo que es más importante, aun no nos han enseñado los estándares de aprendizaje que llegarán en el colegio.

Desde el primer año de colegio. Nos marcarán bien, la forma que debemos utilizar para aprender y el fin que tenemos que conseguir con esos estudios. Vamos memorizar y ser capaces de repetir lo que está impuesto al final del curso.

Lo que quiere decir que es la responsabilidad de los padres, conseguir que los niños mantengan al menos un poco de creatividad que utilizar a lo largo de sus vidas. Y tener un pensamiento más independiente de lo que está establecido como verdad absoluta.