Tenemos entonces que durante 18 años en nuestra Venezuela, se ha solidificado un modo de gobernar que a la fecha tiene a un altísimo porcentaje de la población descontenta y en contra de cómo se han manejado los asuntos públicos, el rechazo es casi total al actual gobierno, eso es lo que se siente, hasta se respira en las ciudades, pueblos y calles de nuestro país, para rematar ahora con el agravante de tener en sus manos, la sangre de muchos inocentes que, dentro del marco constitucional, lo único que han pedido es un cambio pacífico y en respuesta lo que recibieron fueron balas.Aunado a lo que les indico, está la posición de muchos países y organizaciones que a nivel internacional tienen el ojo puesto en Venezuela, un país que antiguamente fue referencia de democracia en la región y que en éstos momentos tiene encendidas las alarmas en todo el continente e incluso en otros como el Europeo, ese mismo en el cual está Francia, la de la “Revolución” que les comenté.Con seguridad aún habrá mucha tela que cortar y cosas por definir, pero con la evidente ruptura del orden constitucional existente y con el mal gobierno avanzando en un proceso Constituyente mal formulado, la posición correcta es enfrentarse con las armas que la misma Constitución de 1999 nos ofrece, agotadas las vías se abrirá otro camino quizás a nivel internacional y por ese nos iremos, junto al pueblo, junto a la gente, con la verdad que nos asiste.Por ahora y para reflexionar les dejo éste pensamiento: “Haga cada uno su parte de deber, y nada podrá vencernos”, cosas del destino que el pensamiento para nada sea de mi autoría, es nada más y nada menos que de José Martí, ¿qué tal?Finalmente, resulta que mi amigo Oscar Raúl no estaba tan lejos de la realidad, solo que estar en contra de un régimen que quiere un solo pensamiento, un solo partido político, una sola manera de actuar, querer un verdadero cambio o transformación radical y profunda respecto al deterioro acelerado del presente, llevar las ideas correctas por el camino correcto sin equivocarse, y si se presenta la equivocación reconocer cuando algo anda mal, no me hace “Chavista”, me hace a fin de cuentas “Revolucionario”, así de simple y sencillo.Reinaldo J Aguilera R. @raguilera68 @pjcontrolelecto
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