‘Spider-Verse Team-Up’ #1, una buena y una mala

Publicado el 13 noviembre 2014 por Rafatos
El inicio de la miniserie Team-Up para Spider-Verse es el reflejo de dos escritores muy diferentes, con propuestas opuestas; mientras que Christos Gage ofrece una historia de mero trámite, de relleno,  el veterano Roger Stern propone un argumento sólido, simple y clásico con final feliz. Algunas veces a Peter Parker, una de sus tantas versiones, tiene derecho a encontrar la felicidad.
SPOILERSSpider-Ham, Old Man Spider y Ben Reilly protagonizan la primera historia bajo el argumento de un Christos Gage, que nos hace recordar sus historias en la etapa de Superior: de puro trámite sin proponer algo significativo. Pareciera que es el hombre atrás de Dan Slott quien se encarga de rellenar los espacios vacíos.
Casi nada me gusta en esta apertura: ni los protagonistas, el arte y la historia. Dave Williams dibuja a manera de encargo, con una narrativa muy pobre al igual que sus trazos. La gracia de Spider-Ham desapareció, Ben Reilly luce muy desmotivado y Old Man Spider no representa absolutamente nada. Podría rescatar el discurso final sobre el optimismo, pero se pierde entre un guion inestable de Gage.
Ya la segunda parte es otra cosa. Roger Stern aprovecha mejor a sus personajes centrales, Six Armed y Noir, dándole un giro a la historia: no es necesario recurrir a la acción y golpes para crear emoción.
Hay mucho optimismo y la interacción entre personajes es más rica que la historia previa. Noir destaca con sus pensamientos y Six Armed representa el lado más bondadoso que Spider-Man pueda tener. Stern sabe manejar a ambos Spideys y al mismo tiempo presenta un choque de personalidades ligadas al mismo fin: un gran poder conlleva una gran responsabilidad. El final feliz es la cereza del pastel.
Bob McLeod dibuja y lo hace correctamente, no más no menos, solo correctamente.
Spider-Verse Team-Up 1 contiene dos historias opuestas de dos visiones diferentes. Al final de cuentas es el objetivo del comic, presentar ángulos diversos. No obstante es difícil calificar a dos historias de la misma manera. La primera mal, la segunda bien.