¿En que consiste esta figura? Pues en que los músculos, los tatuajes y uno que otro pircing cobran protagonismo y se vuelven muy importantes. Pero no sólo pasa por el aspecto, sino que también hay cambios a nivel emocional y de actitud. En ese sentido hay un resurgir de la “virilidad salvaje” y un toque de vanidad.
Es todo lo contrario a la figura del metrosexual que estuvo de moda durante un tiempo. Ese hombre se caracterizaba por el refinamiento excesivo y por poner atención en el cuidado del cuerpo a nivel estético. La manera “femenina” se deja atrás para dar paso al macho, al erotismo y a una pizca de “brutalidad”.
Los cambios se están presenciando desde aquel mundo que siempre es el que marca tendencia: la publicidad. Los modelos dejan de ser jóvenes esbeltos con aire snob, para convertirse en hombres rudos de barrio, trabajadores y musculosos. Por esa razón es que muchos deportistas han podido incursionar en el mundo del modelaje.
Este modelo de hombre no gasta dinero ni tiempo en masajes o faciales, sino en gimnasios y en productos para aumentar la musculatura; no oculta su cuerpo debajo de ropas de moda, sino que prefiere estar desnudo o con vestimentas que permitan mostrar su trabajado cuerpo; y disfrutan de la conquista amorosa y del porno.
El nuevo término, al igual que el anterior de metrosexula, fue acuñado por el periodismo. En ambos casos el creador fue el inglés Marck Simpon, que siempre estaba muy atento a los cambios en la moda varonil. El término metrosexual se popularizó en 1994, mientras que el de spornosexual apareció por primera vez hace unos días en el Telegraph.
Spornosexual surge de combinar las palabras sport (deportes) y porno; ambas explican a la perfección a este nuevo tipo de hombre que quiere ser deseado por su cuerpo y no por su armario, su buen gusto o su inteligencia.
Los secretos de un spornosexual
Más allá del interés por querer cuidar el cuerpo, verse bien y sentirse cómodo con uno mismo, un spornosexual puede esconder graves trastornos detrás de su obsesión por el gimnasio y la musculatura.
Los entrenamientos excesivos, las dietas sin control nutricional y el uso de anabólicos son situaciones muy comunes en este tipo de hombres. Todos suelen ser comportamientos compensatorios para equilibrar una gran falta de confianza y seguridad en si mismos que no consiguen superar por otros medios.
Además,querer tener un cuerpo envidiable y mostrarlo todo el tiempo con orgullo son señales de que se está buscando constantemente aprobación y la mirada del otro; ambas señales de poco amor propio y de excesiva preocupación por el “qué dirán”.
Igual ocurre con la conducta vanidosa que suelen tener; clara señal de que se necesita de cosas que incrementen su ego. A todos nos gustan los elogios y muchas veces nos sentimos satisfechos con nosotros mismos, pero buscarlos y sentirlo en exceso es negativo.
Sin embargo, esto no significa que todo spornosexual esconda un comportamiento enfermo y narcisista. Aunque es probable que todos los que sientan estas carencias se inclinen por esta moda, debido a que están más predispuestos a ella.
Del metrosexual al spornosexual
Los expertos señalan que la transición entre uno y otro modelo de hombre no fue tan brusca como la hace parecer Simpson en su artículo, quien de un día para el otro da por caduco el metrosexualismo e instaura el spornosexualismo.
Ellos establecen que el cambio ya era visible en las redes sociales, donde jóvenes musculosos sin fama se auto-fotografiaban sin ropa por el simple placer de cosechar millones de “me gusta” y de piropos por parte de la platea femenina. De hecho, podría decirse que ellos marcaron esa tendencia de la imágenes en desnudo o sólo con calzoncillos.
A su vez, relacionan este tipo de hombre directamente con los programas de reality, donde la única finalidad es mostrarse. Entonces, sostienen, es normal que los hombres (y mujeres) piensen que si esto va a ocurrir es mejor que se vea “lo mejor de uno”.
Sin embargo, para otro los culpables se encuentran en la publicidad y en los medios, quienes crean nuevas representaciones en el imaginario popular. Claro está, necesitan estar directamente ayudados por la misma sociedad, que debe poseer ciertas características para convertirse en el caldo de cultivo y el receptor ideal. De no ser así, los intentos de imponer una nueva moda tienden a fracasar.
Ahora que sabes qué es un spornosexual y cómo se diferencia del metrosexual, cuéntanos ¿Tú que modelo de hombre prefieres?
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