Stallone despide a Wayne Kramer por querer que 'Headshot' fuera demasiado violenta y oscura

Publicado el 07 abril 2011 por Davicine
Hacía tiempo que no hablabamos del próximo proyecto de Sylvester Stallone como actor, Headshot, en la que el actor hace equipo con un joven detective de policía de Nueva York para investigar un peligroso caso que les lleva desde las sucias calles de Nueva Orleans hasta los corredores de poder de Washington, DC. El dúo, reunido por dos asesinatos, asume todo lo que se interpone en su camino, y están dispuestos a sacrificarlo todo para vengarse.
De ella se sabía que iba a ser dirigida por Wayne Kramer, y arrancaría su rodaje el próximo mes de mayo, aunque hoy, tras un tiempo sin hablar de ella, nos toca anunciar que ha perdido a su director, pues Stallone y Kramer han tenido diferencias creativas a la hora de ver como dirigir la película. No sería extraño que fuera el propio Stallone el que acabara al frente del proyecto, pues ya abandonó la dirección de la secuela de Los Mercenarios, y tiene tiempo en estos momentos para afrontar este nuevo proyecto.
En recientes declaraciones de Stallone, parece que Kramer fue despedido porque quería hacer la película mucho más oscura y más violenta que la idea de Sly: "Al principio, el Sr. Kramer fue contratado para dirigir una comedia de humor negro, sin embargo su visión era mucho más oscura y más violenta que la idea original del proyecto, tal y como fue concebido. Decidimos que sería mejor para todos seguir adelante y por lo tanto el Sr. Kramer fue despedido por los productores a principios de esta semana. No hubo enfrentamientos, se trataba simplemente de una separación profesional".
La idea es seguir adelante con este proyecto, y por el momento Stallone ya se ha reunido con Walter Hill (48 horas), de quien ha dicho: "Respeto completamente el increíble trabajo de Walter y espero que este legendario director se una al proyecto".
Veremos si consiguen que la película comience su producción antes del verano.
Fuente: DeadlineMuchas más noticias en No es cine todo lo que reluce.