Historia de Stick No Bills
Stick No Bills, fue fundada por Meg y Philip, se originó de una pasión compartida por el arte y la misión de celebrar y resguardar un patrimonio visual. Esta pareja tiene antecedentes en negocios internacionales y diseño. También aprovecharon la oportunidad en el mercado de posters vintage lo que combinaron con sus habilidades e intereses.
Cabe destacar, que para Meg Gage Williams es imposible creer que este local que abrió su tercera tienda de carteles antiguos era antes una ferretería. Por lo que, piensa que es una ubicación icónica, justo detrás del mercado de Santa Caterina.
Según explica la empresaria británica que este es un barrio muy interesante para ella, ya que vivió durante muchos años a la ciudad catalana y su recuerdo le ha hecho regresar.
Posters colgados en el establecimiento
Así se refiere, mientras está sentada en uno de los sofás vintage, que colocó para dar una sensación retro como la de los pósters que aparecen colgados en el establecimiento en el que no dejan entrar los turistas, señalando lo siguiente: “Barcelona está en el centro del mundo”.
Stick No Bills corresponde a la tercera tienda que abre Gage Williams, además de las que posee en otros destinos turísticos como Sri Lanka y Mallorca. Cabe destacar, que en estos tres sitios ha residido y comenzó en el país asiático con su marido, Philip James Baber. Quienes coleccionaron pósters y aperturaron su primer local y su tienda online.
La recolección de carteles fue protagonizada por James Bond, Hollywood o Bolluwood. Los que prontamente observaron los clientes que preferían a los que los ilustraban a las ciudades y lugares conocidos de Sri Lanka a finales del siglo XIX.
Colección de posters
En su vasta colección Stick No Bills comprende varias décadas y estilos, estos carteles van desde coloridos publicitarios de la era dorada del turismo hasta afiches de películas. Estos carteles marcaron la diferencia para la época, siendo cada pieza una obra de arte.
Los posters vintage son una explosión de diseño y creatividad. Además de una representación de las tendencias sociales y culturales de los tiempos respectivos.
Socio inversor Carlos Andreu Cantarell
La petición era que aterrizaran en Mallorca, donde se mudaron después que se fueron a vivir en Sri Lanka. Fue cuando se hizo socio inversor Carlos Andreu Cantarell, un empresario barcelonés lo que les ayudó a conseguir un sitio en la ciudad. Pero, no están de acuerdo en detallar la inversión. Esto supone poner en marcha la tienda en Ciutat Vella, donde ya se han contratado cinco trabajadores.
Ya son 650 pósteres en Barcelona, donde tienen 2.000 más en el almacén. Donde resalta esta recuperación que ha elaborado carteles de la tienda en modo de lujo Santa Eulalia. Asimismo, fueron concebidos durante los años 20 y 30 del siglo pasado. Los cuales fueron firmados por artistas como José-Luis Rey Vila.
Precios de los carteles
En cuanto a los precios de los carteles van desde los 4 euros de las postales hasta los 29 y 39 euros de los pósteres. En cambio, cuando no se trata de ediciones limitadas, es entre 45 euros y los 795 euros. Por otro lado, cuando el cartel es más grande, el que se encuentra colgado en la tienda, con las letras de Barcelona. El valor asciende hasta los 16.000 euros.
Según remarca Gage Williams, lo siguiente: “No son el típico souvenir”, quien piensa que tiendas como la suya solo son para visitantes que abundan en un barrio menos barcelonés, lo que favorece a proyectar a la ciudad.
Como puedes ver, Stick No Bills, es una tienda para aquellos que les encanta la historia visual y el arte vintage. Gracias a su compromiso, calidad y autenticidad, la tienda ha ganado un lugar especial en el corazón de aquellos que aman el arte a nivel mundial. Así que, ya sea que busques una pieza específica o simplemente desees perderte en imágenes del pasado, así que, Stick No Bills es el lugar ideal para realizar tu viaje.