Stone -De Niro, Norton y Jovovich compitiendo a ver quien hace más el gilipollas

Harry Powell (compañero cinéfago) y yo coincidimos en muchas cosas, en una de ellas es la de acabar una película una vez que la empiezas. Casos raros, muy raros, son los que nos han hecho apretar los dientes y no llegar hasta el final. Tanto él como opinamos lo mismo sobre Stone. Es una auténtica tontería irrecomendable. Bueno, a no ser que tengas un lápiz y un papel a mano y  quieras apuntar los gestos que hacen Robert De Niro, Edward Norton y Milla Jovovich y jugar a ver quien es el ganador.

El principio de la película era más o menos prometedor, siendo algo benignos. Una escena del pasado de De Niro nos mostraba la relación que tenía con su mujer. Dejando entreveer que el tema de la película podía ser interesante. ¿Cuánto duraba eso? ¿cinco? ¿diez minutos? Una vez acabado ése momento el resto de la película es totalmente prescindible para mentes cuerdas y que no quieran acabar en la consulta de un psicólogo ante tal despropósito. De Niro con los gestos y el rictus que nos lleva obsequiando durante bastantes lustros, Norton igual -que también tiene los suyos cuando se desbarata- y Jovovich siguiéndoles el juego. Ella y su marido (Norton) que se encuentra en la cárcel intentando marear a De Niro para que haga algo que realmente ni le importa al espectador. Ni siquiera la relación que él mantiene con su mujer -a la cual acaba engañando con Jovovich- acaba siendo de interés.

En ningún momento se encuentra algo de suspense, que podía haberlo tenido, ni tensión, que también podría haber estado ahí, tan sólo 105 minutos aburridos a más no poder donde el botón de parada del mando está constantemente a punto de ser apretado -eso me pasó a mí en más de una ocasión-.

Lo curioso del asunto es que tuvo publicidad, no hablamos de una película de serie b o de estreno para televisión, si no de promoción pura y dura. No tipo Blockbuster, pero sí de algo que podía haber dejado medianamente satisfecho al público. Nada, si buscáis eso encontradlo en otra película, ésta no es la correcta para esos menesteres.

Puede ser que esta reseña se haya hecho corta, una vez la he repasado creo que es así, pero qué queréis que os diga. Hablar más sobre ella -si la habéis visto me entenderéis- lo considero una auténtica pérdida de tiempo. Si la he hecho ha sido más que nada para advertir a aquella gente que todavía no se ha acercado a ella.