Suede demuestra que sigue siendo una gran banda en el festival SOS 4.8 de Murcia

Publicado el 09 mayo 2011 por Carol


¡Qué poco dura lo bueno! De vuelta ya del festival SOS 4.8 de Murcia, me da la impresión de que ha pasado todo en un minuto. Las críticas que han aparecido en prensa dejan en bastante mal lugar a Suede, para ensalzar a !!! ya que ambos grupos tocaron casi a la vez. No estoy de acuerdo. Suede sonó impecablemente bien, Brett Anderson mostró toda su potencia de voz y ofrecieron un repertorio que no se dejó casi ninguno de sus grandes éxitos: The Drowners, Beatiful Ones, So young, Trash, Metal Mickey, The wild ones, Filmstar, Can't get enough... Si bien es cierto que en algunos temas más comerciales parecía que simplemente querían cumplir, como con Beatiful ones, que atacaron a un ritmo endemoniadamente rápido, Suede se movió como pez en el agua especialmente en las canciones más lentas como con la preciosa Everything will flow. Brett no paró ni un momento, bailando, saltando o acercándose al público, encadenó una canción tras otra y demostró que hay Suede para rato.


Sin embargo, el grupo que realmente me sorprendió fue Editors. Era la tercera vez que les veía en directo, y he sido testigo de la asombrosa transformación de la banda. En el primer concierto que vi de ellos en el Palacio de Vistalegre de Madrid, por culpa de problemas técnicos, el sonido fue absolutamente desastroso, y Tom Smith, el cantante, apenas supo interactuar con el público. En el segundo, como teloneros de Muse en el Calderón, se resarcieron con un impecable sonido y una actuación magnífica, aunque de nuevo sin feeling con el público. En Murcia, sonaron más que bien y Tom Smith nos dejo ver su otra cara, la del músico que disfruta y hace disfrutar al público, mandando besos, moviéndose por todo el escenario y esmerándose porque todo el mundo lo pasara bien. Sin duda, la mejor actuación para mi gusto del festival.


La nota negativa va para White Lies a quienes veía por primera vez. Aunque atacaron sus grandes éxitos con ganas, el sonido fue terrible. El bajo se oía por encima del resto de instrumentos, retumbando y totalmente mal ecualizado. He leído después que al parecer las intensas lluvias del sábado en Madrid impidieron que los tres grupos británicos pudiesen aterrizar en la capital, así que tuvieron que hacerlo en Valencia desde donde les trasladaron a Murcia. Por ello, no pudieron probar el sonido. En el medio de comunicación donde leí esto, decían que les había ocurrido a Suede y a Editors. No fue así, ya que ambos grupos pudieron probar antes los instrumentos, de hecho, Suede empezó un poco tarde porque hubo una prueba de sonido bastante exhaustiva y ambos sonaron perfectos. Me temo que White Lies, el primero de los tres en saltar al escenario fue quien sufrió la situación. Tendré que volver a verles en directo para poder formarme una opinión de ellos.
En cuanto a la organización del festival, al que iba por primera vez, tengo algunas pegas que ponerle, principalmente la aglomeración de gente, ya que estaba totalmente abarrotado, especialmente durante la actuación de Suede, si hubiésemos tenido que evacuar el lugar creo que podría haber habido algún problema. Las zonas verdes y de descanso eran prácticamente inexistentes, por lo que nos tuvimos que conformar con el asfalto y escasos puntos de sombra. El transporte y las indicaciones hacia el lugar donde se celebraba el festival eran inexistentes, tan solo había autobuses para aquellos que hubiesen comprado el paquete de entrada y alojamiento. Para el resto, la línea de autobús regular, totalmente a tope de gente, sin señalizar y con poca frecuencia. Lo normal y habitual en estos casos es que la organización del festival ponga transporte gratuito al recinto. Por último, me pareció de bastante mal gusto que la actuación de Patti Smith se hiciera en un pabellón cerrado. Para poder acceder había que hacer una cola adicional para recoger entradas, y claro, al menos una hora antes del concierto ya estaban agotadas. Si todos pagamos por igual el precio de la entrada al festival, no entiendo por qué unos privilegiados pudieron ver a Patti Smith y otros no. Lo normal hubiera sido que actuase en los escenarios al aire libre como todos, y no metida en un recinto al que solo pudieron acceder unos pocos como si se tratara de un privilegio.



Criticas aparte, ha sido una expeciencia única, he podido ver por fin en directo a Suede, uno de mis grupos favoritos, y he disfrutado al cien por cien de la música, como siempre. Ahora, queda esperar al próximo festival, en el mes de junio, el dcode en Madrid, donde actuarán, entre otros, Kasabian