Qué suerte tengo, de verdad, tengo mucha suerte.
Paseando por estas calles de Madrid, la capital del Reino de España, tengo suerte, lo confieso, tengo mucha suerte.
Paso por un jardín urbano con bastantes árboles y no se troncha ninguno a mi paso.
Suerte de encontrarme toda la basura convenientemente esparcida por muchas de sus calles. Suerte de que en la calle en donde está situada mi morada, sólo puedo ver de vez en cuando, alguna muestra reciente o no, de alguna necesidad de algún can que ya no podía resistir más y su ama/o no tuvo, al parecer, la cortesía de recogerlo convenientemente.
Suerte tengo de no haber pisado esa muestra del can, dejando constancia en mi retina de la mala educación del amo/a.
Suerte de acercarme a mi panadería habitual y encontrar al panadero, que aunque lleva un bastón, sigue dispensando pan a los parroquianos y algunos tenemos la suerte de charlar con el de las avatares de la vida cotidiana y casi siempre llegamos a las mismas o parecidas conclusiones, después de 'arreglar' el país.
Suerte de que al final de la charla creemos que sí se puede arreglar estos desarreglos que perpetran en general los políticos que ahora detentan el poder.
Suerte de que pueda también ir a mi kiosco de prensa y saludar a mi amiga que lo regenta y poder decir que estamos bien y que de momento seguimos en esta vida, pues otra no conocemos, que no es poco; por cierto, suerte tengo que todas las personas con las que he saludado y charlado, muestren siempre una sonrisa que por fortuna es contagiosa y de vez en cuando nos salen carcajadas a borbotones por ocurrencias que lanzamos.
Es de agradecer, pues, tengo mucha suerte.
Entonces leo la prensa diaria y me doy cuenta que mi suerte no extensible a muchas personas. He aquí algunos titulares que demuestran que me arrebatan mi sonrisa:
"Margallo echa gasolina y habla de la posibilidad de suspender a autonomía a Cataluña"
"Wert ficha por 'el club de la comedia': palabrería desesperada para ocultar que han rebajado las becas"
"La policía disuelve a la fuerza la concentración contra el Toro de la Vega, mientras sus 'detractores' triunfan en Twitter"
La presentadora de TVE, Mariló Montero dice: "Casi han linchado más al pregonero del Toro de la Vega que al animal"
"El consulado de España en Quito niega el visado para estudiar en la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA), a una joven por ser pobre"
Ya no quiero seguir resumiendo titulares; la verdad, es que tengo mucha suerte.