Sumo

Por Glamourdelust
¡Feliz Navidad!
¿Qué tal van las fiestas? ¿Mucha comilona?
Yo estuve en Málaga viendo a la family y ha estado todo genial. Realmente me siento muy afortunada por tener una familia y, sobre todo, los recursos para celebrar estos días por todo lo alto. Se me parte el alma pensando en toda la gente que dará las gracias si puede llevarse algo a la boca :(
En fin...
Hoy os propongo un poquito de comida asiática, ¡que desde el Morikaen no he puesto nada japo!
El sitio del que os voy a hablar me lo enseñó mi amigo Isra y, casualmente, a raíz de ir nosotros, e hablado con más gente que también ha ido recientemente y con opiniones muy dispares. Si queréis leer otra, además de la mía, os dejo el link de este blog (sí, hago publicidad de forma altruista de gente que no conozco, soy así de maja).
Bueno, vamos al lío.
El restaurante del que os hablo se llama Sumo, y se encuentra en la calle Fuencarral 116 (metro Bilbao L1 y 4, o Quevedo L2). No he encontrado web, ni página en Facebook, ni nada, así que no os puedo dar más información.
Como ya he comentado antes se trata de un sitio de comida asiática pero, sobre todo, gastronomía japonesa.
Tienen una carta bastante amplia que varía según sean comidas o cenas.
La forma de pedir también varía puesto que podéis elegir entre el "método tradicional" (platos sueltos de la carta) o el "modo buffet". Os cuento:
Te dan un papel con todos los platos que puedes elegir, y puedes hacer 3 pedidos de 6 platos cada uno, es decir, pagas por 18 platos (por persona y siempre que consigas comerte todo, claro).
Podéis elegir sushi, arroces, tallarines, carnes, ensaladas, sopas, verduras... Prácticamente cualquier cosa que os podáis imaginar.

Ensalada wakame, pollo teriyaki y gyozas


En principio todo parece apetecible, pero tuvimos una horrible experiencia con el pollo teriyaki (que en la foto sale precioso) ya que olía fatal y al probarlo nos dimos cuenta de que llevaba unos cuantos días más que pocho. Nos ofrecieron cambiarlo pero ya no nos atrevimos con más pollo...

Ahí donde lo veis, ¡no dejamos ni una migaja!


Como podéis ver en las fotos pedimos absolutamente de todo hasta agotar los 18 platos de cada uno y nos pusimos hasta arriba: tempura de verduras, de langostinos, makis, niguiris, udon, empanadillas al vapor, ternera en salsa, sopa miso, tofu, temakis...

¿Valgo para niña de San Ildefonso?


Los postres y la bebida no están incluídas en los menús, pero encontramos unas bolitas de sésamo que nos supieron a gloria (sobre todo a mí, que soy adicta a ellas, jeje!).
El local está a estrenar por lo que está perfectamente acondicionado y muy moderno.
Los camareros, sin embargo, no son tan buenos y van bastante "a su bola", es decir, son muy serviciales, te quitan todos los platos vacíos al instante de la mesa, etc, pero se les olvidaron varios platos, no eran especialmente atentos (y eso que había solo 4 o 5 mesas) y no nos tomaron muy en serio cuando les dijimos que el pollo era del año pasado.
El precio varía entre comidas y cenas, y si es diario o fin de semana, pero para que os hagáis una idea, los menús están entre 8 y 16 € (tened en cuenta que la bebida, los postres y algunos de los mejores platos se cobran a parte).
Valoración final: un 7. La comida estaba bien pero sin ser nada del otro mundo (mucha fritanga, como decía Pablo), y lo del pollo... En fin... Y nos atendieron muy regular. Por otro lado, a mí no me parece tan barato como lo pintan, pero bueno, para ir un día sin haber comido 48 horas antes, está bien, jaja!
Bueno, ¿qué os ha parecido?
Quizá esta sea la última entrada del 2013, así que si nos os vuelvo a escribir os deseo lo mejor para este año que entra, para que todos vuestros sueños se hagan realidad y seáis muy felices con los vuestros.
Mil gracias por este increíble año de visitas (¡ya van 13500!), comentarios, RT's, "Me gusta", recomendaciones... y mil besos a todos.
Carolina.