Esta situación ha propiciado el arranque en los últimos meses de la colección World of New Krypton. Guionizada por los incombustibles Greg Rucka y James Robinson, aprovecha para mostrarnos los entresijos de la mencionada civilización alienígena tomando elementos del universo de Superman (ya sean los cómics o las películas) y de series como Star Trek para presentarnos una sociedad curiosamente basada en la clásica ideología trifuncional, es decir, aparece dividida en tres clases (aquí llamadas gremios) que se corresponden con las de La República platónica: científica, militar y artesana. Superman no lo tendrá nada fácil, además de no ser el único con poderes deberá ganarse una posición respetable, enfrentarse al general Zod en una lucha por el poder desarrollada brillantemente y conocer a sus compañeros, que ocultan unos cuantos secretos; por lo que aunque se trate de un ambiente chocante y poco superheroico sí que podremos apreciar los valores característicos del personaje.
Para ilustrar los distintos niveles de la sociedad kryptoniana nos encontramos a Pete Woods, dibujante habitual de Superman que está realizando una labor encomiable. Con un estilo en el que la influencia de los cómics clásicos se hace notar, Woods refleja a la perfección la atmósfera del planeta incluyendo los citados guiños a Star Trek o el mundo del hombre de acero, por no mencionar que entinta sus propios dibujos, lo cual no hace sino dar más mérito a su trabajo.
Como ya se intuía, este macroevento durará varios meses y sus distintos frentes se desarrollarán en varias colecciones para la desesperación de los lectores. Así, mientras Kal-El protagoniza la serie en que se centra este post, Mon-El protege Metrópolis de las maquinaciones de Lex Luthor y Supergirl, Nightwing y Flamebird se enfrentan a su manera al inquietante Nuevo Krypton en los tomos independientes publicados por Planeta.
Aun así, la colección protagonizada por Superman supone una serie fresca y entretenida que seguir cada mes al presentarnos al superhéroe por excelencia en una situación atípica a la que no se ha enfrentado antes. Kal-El ya no es el último hijo de Krypton, y esto le costará caro.