El origen de estos supersaurios es de lo más variado: extraterrestres, mutaciones... Y aunque la mayoría adolecen de una tendencia a la antropomorfización que nos parece innecesaria, existen notables excepciones además de Devil Dinosaur, como el deinonico Old Lace.
El archipremiado guionista Brian K. Vaughan ideó al supergrupo Runaways (2003), formado por unos adolescentes que descubren que sus progenitores forman parte de una organización oculta de supervillanos. El planteamiento es interesante, pero lo mejor estaba por venir. Parece que los padres de Gertrude Yorkes le han ocultado algo más: en el sótano guardan un deinonychus con el que la joven tiene un vínculo telepático. La criatura es bautizada como Old Lace y se une al grupo en su lucha contra el mal. En 2017, la serie pasó a televisión en Hulu (tres temporadas, aquí puedes verla en HBO): Old Lace es un muñeco que manejan seis personas (una bombea aire para simular respiración). Aquí puedes ver un tráiler.
Unos científicos malvados viajan al pasado para inyectar un agente mutante a un grupo de aves rapaces para convertirlas en asesinas inteligentes (¿Por qué no? ¡Es divertido!), pero cuando éstas matan a una pareja de triceratops, su cría se inyecta también accidentalmente, convirtiéndose en Blastosaurus. Así comienza el cómic más vendido en los últimos años en Nueva Zelanda, escrito por Terry Jones para el dibujante Richard Fairgray desde 2008. Si es sorprendente el origen del supersaurio, tal vez más aún lo es la circunstancia de que Fairgray es prácticamente ciego (sólo tiene un 3% de visión en uno de los ojos).
Como colofón a todo lo que hemos visto hasta ahora, muy recientemente hemos sabido que la tesis de Kirby de que los superhéroes eran descendientes de los monstruos (entre ellos, los dinosaurios) que les habían precedido en los comic-book ha dado un vuelco sorprendente al saberse que, de hecho, los supersaurios les precedieron en la cronología fantástica de los cómics (no podía ser de otra manera, ya que el Mesozoico tuvo lugar 66 millones de años antes): el primer miembro de “Los Vengadores” fue un tiranosaurio («As Strong as the Stars», Jason Aaron/Dale Keown, 2019) y, en alguna dimensión, el justiciero conocido como Batman fue un dinosaurio (Dark Nights: Death Metal, Scott Snyder/Greg Capullo, 2020). Como puedes comprobar, el subgénero de los supersaurios tiene un potencial increíble y se encuentra en plena expansión. Desde aquí, estaremos atentos a cuanto suceda en este mundillo para contártelo antes que nadie.