SUSAN DEY Y ANGELA RODICIO.....o mis ídolos de juventud.

Por Nosoysuperwoman
Cuando yo era pequeña, me pirraba por ser abogada. Pero no una abogada cualquiera, sino una de las de mi serie favorita en esos momentos. La ley de Los Ángeles. Ya me veía yo, entrando en el supermegaedificioquetecagas, donde en uno de los pisos más altos estaba mi despacho, junto al de un pedazo de macho ibérico (por favor, relee esta última expresión con acento de Chiquito de la Calzada, se lo merece), por más que estuviésemos en USA.


Pero también tuve mi temporada de periodista. ¡Ja!, no, no vayáis a pensar que ahora me estoy desquitando escribiendo un blog chorras para compensar mi frustración. Para nada. Porque yo, lo que quería ser, era reportera de guerra.  Quería ser la Ángela Rodicio de turno. Recuerdo cuando cayó Ceaucescu, qué envidia me daba la muy….(voy a mirar en Google en qué año fue esto…..¡1989! yo tenía 16 años…..qué repelente, coño, ¿quién a los 16 está enterado de la caída de nadie que no se produzca en una discoteca…..?) ((CORRECCCIÓN: TENIA 13 AÑOS, ASÍ QUE LA FRASE ANTERIOR DEMUESTRA LO PEDORRA QUE ERA Y PORQUE ME INCLINABA POR UNA CARRERA DE LETRAS))Se aceptan análisis psicológicos sobre este comportamiento. Yo parto de la base de que la causa es que en casa me decían siempre que yo era la mejor....y por lo que veo ahora ellos son los culpables de que yo alentase este tipo de pensamientos gilipollas tan elevados. Pues bien, ahora veo que mi grado de repelentez se agudizó con el pasar del tiempo, porque finalmente, abandoné mi idea de ser reportera de guerra por unas razones muy lógicas para una pedorrachica de 17 años: uf, complicado tener una vida así para siempre, viviendo de un lado a otro, y sin estabilidad- y decidí volver a la idea original: ser la chica del supermegaedificioquetecagas, pero en edición mejorada. Claro, porque además de abogada me imaginaba yo un rollo tipo Armas de Mujer (ya sabéis, yo era Melanie, claro, nada de Sigourney Weaver, por Dios!) y me imaginaba diciéndole a mi recién conocido jefe (por supuesto enamoradísimo de mí y que casualmente se parecía Harrison Ford pero a la española) algo tan natural y absolutamente profundo como en la peli “tengo una mente para las finanzas y un cuerpo para el pecado” o  “si quieres que te tomen en serio, lleva un peinado serio”   mientras sonaba de fondo “Let the river run”. (Tenéis que entender que, para mí, en ese momento de mi vida, ambas frases seguramente tendrían la misma trascendencia….qué horreur)Vamos, que yo lo flipaba demasiado. Por suerte, con el tiempo he ido suavizando ese estado de permanente estupidez en el que vivía....y con el que tanto disfrutaba, porque era genial imaginar todas esas historias (con macho ibérico incluido en el pack, por supuesto).¿Qué hice? Pues estudié Derecho, me lo pasé muy bien, conocí a mucha gente, me encantaron algunas asignaturas, otras las odié profundamente y a estas alturas no sé para qué sirven (¿¿¿¿Derecho natural????¿¿¿Filosofía de 5º??? . Lo llevé curso por año (ser repelente se lleva en la sangre y es imposible eliminarlo totalmente de golpe)……y decidí al terminar que eso no era lo mío. Que no sabía qué era lo que quería, pero ejercer, al menos por el momento, no. Porque yo nunca he sido fan de nada, pero tampoco he tenido ninguna vocación.Azíndeque me fui a estudiar inglés, hacer un máster …y la pequeña Rodicio que estudió para Garzon(cilla) trabaja en el departamento  internacional de una empresa comprando cositas a gente que está al otro lado del mundo, y que lo más emocionante que hace es irse de vez en cuando de viaje a sitios que están allí mismo, en el culo del mundo para poder discutir en persona y pedir "balato, balato"