Suzanne Vega - 99.9 F° (1992)

Publicado el 10 enero 2020 por Moebius
¡No me cuelguen cabezones! Seguro el Mago Alberto me va a hacer bullying por postear pop, va a decir que lo hago bajo la influencia de Luismi el del yate... Pero ¡esto no es cualquier pop!, es una poeta que canta de maravilla y este es probablemente el mejor álbum de su discografía. Pop que excede sus fronteras, inteligente y versátil, con aires desde el folk hasta el new wave y el techno y una poética intensa y profunda que explora lo más recóndito del alma humana. Este es un discazo de Suzanne Vega en el que no falta experimentación sonora; el más explorador y avezado de todos sus trabajos, que confirma la gran compositora que ya sabíamos que era desde aquellos famosos hits, “Tom’s Diner” y “Luka”.
Artista: Suzanne Vega
Álbum: 99.9 F°
Año: 1992
Género: Pop, new wave, techno, folk
Duración: 39:38
Nacionalidad: EUA
Suzanne Vega nos viene a la mente porque es una exitosa cantante pop desde fines de los ochenta. Al menos dos de sus canciones llegaron a niveles de popularidad que hubieran soñado muchos otros artistas: “Tom’s Diner” y “Luka”. Pero el secreto de Suzie Vega está más allá de la resonancia de esos hits: su mayor triunfo ha sido poder colocar una poesía profunda y comprometida, compleja en su aparente sencillez, en el espectro del pop: el suyo ha sido un papel formativo si ponemos atención en sus agudas alusiones a problemas y situaciones de la realidad rodeadas por el sufrimiento.

Y no sólo eso. La fuerte poesía de esta notable creadora viene envuelta en un cuidado ropaje musical. Si en sus primeros discos destaca lo acústico, en 99.5 F° hay una aproximación que experimenta con la electrónica y consigue un sonido realmente único, digno de un lugar en el blog cabezón. Así que perdonen, cabezones y cabezonas, si les parece que este disco está fuera de sitio en el blog: les aseguro que no; que es uno de los más destacados discos de los 90 y les propongo escucharlo con atención. No se van a decepcionar y acabarán pidiendo más de esta genial artista neoyorquina que sigue en intensa actividad hasta hoy.
La seriedad de su trabajo se ve desde sus inicios a mediados de los 80. Después de estudiar danza moderna emprendió un posgrado en literatura inglesa, pero para entonces ya presentaba sus canciones —en una vena claramente folk y siempre acústica— en locales de Nueva York. Pronto consiguió firmar con una disquera: no eran sólo sus canciones sino su estilo al cantar, suave y discreto, alejado de todo exceso expresivo, con un timbre que la llevaría a un éxito insospechado en dos temas de su segundo álbum (Solitude Standing, 1987, producido por el guitarrista de Patti Smith, Lenny Kaye): “Luka”, un bellísimo poema que narra la tragedia del maltrato y el abuso infantil desde la perspectiva de una víctma, temática totalmente ajena al pop de aquellos días (y actual hasta el cansancio en los nuestros), y, cantando a capella, “Tom’s Diner”. Este tema, inspirado según la propia Suzanne por sus reflexiones en torno de la alienación respecto a la humanidad (según ella misma ha dicho recientemente en un par de tuits en su cuenta @SuzieVega), habría de convertirse en su composición más exitosa después de que el dúo electrónico británico DNA lo remezclara con acompañamiento techno en 1990. Como todo lo que durante los 80 y 90 venía del universo del remix, DNA hizo su versión sin autorización. Al conocerla, Vega no solo dio luz verde a la versión sino que decidió que fuera distribuida a través de su propio sello. Aparecería entonces el EP Tom’s Album, que recoge la versión original a capella, el remix de DNA y una serie de nuevos remixes y versiones hechos sobre las mezclas de los dos primeros.
Pero antes de esto, Suzie había alcanzado ya otros picos. En sus inicios colaboró en la película Pretty in Pink (Howard Deutch, 1986), una de las marcas de identidad de la década de los 80, donde colocó un extraordinario tema de su primer disco, “Left of Center” y trabajó con Joe Jackson, otro músico pop que pronto daría el salto hacia lo progresivo y experimental; Suzie estaría con él en el polémico disco Heaven & Hell (1997), que desde mi punto de vista es extraordinario pero los críticos lo han decapitado “por pretencioso”. Más tarde escribiría letras para temas de la serie en la que el minimalista Philip Glass se encontraría con artistas populares: Songs from Liquid Days.

Quizá su cruce con el techno postpunk de DNA dejó una huella en los proyectos de Suzzane Vega. La producción de 1992 99.9 F° sale del esquema electroacústico que caracterizó sus primeros discos y propone una lograda fusión con la música electrónica (incluso de carácter dance) e industrial. Las canciones de Vega, fuertes e intensas, se transforman en este disco en poderosas muestras de lo que la autora era capaz de lograr. La carátula misma deja atrás la foto un tanto naïve de los discos anteriores y envuelve a la cantante en llamas; el mismo diseño del cuadernillo del CD (concebido por la autora) es una especie de afiche, naranja profundo, que sigue el estilo del cartel decimonónico del viejo Oeste.
Al romper la barrera acústica, Vega se rodeó de músicos de primer nivel. En 99.9 F° están presentes músicos que han formado parte o han trabajado con bandas legendarias. El combo base está formado por Mitchell Froom (que después sería pareja de Suzie por algun tiempo) es un tecladista y productor que ha colaborado, por ejemplo, con Peter Gabriel (en Up) y tenido en sus manos como productor trabajos de Los Lobos, Paul McCartney y Pearl Jam, entre muchos otros; el guitarrista, ingeniero de audio y productor Tchad Blake que ha colaborado con Gabriel, Pearl Jam y Tom Waits entre decenas más; David Hidalgo, el guitarrista de Los Lobos que también ha apoyado a Tom Waits y ha tocado con Clapton; el bajista inglés Bruce Thomas, activo desde fines de los 60 con Al Stewart y miembro de The Attractions, banda de apoyo de Elvis Costello, y el baterista Jerry Marotta, que fue base en la banda de Peter Gabriel de 77 a 86 y desde 95 está con, nada menos, Tony Levin.
 Además, participan en algunas pistas, entre otros, Richard Thompson (guitarrista y compositor de Fairport Convention), Jerry Scheff (bajista de los últimos discos de The Doors que también trabajó con los dos Elvis, Presley y Costello), Sid Page (violinista con Sly & The Family Stone), Joel Derouin (violinista que ha acompañado a ELP y a Rush) y Maria Newman (violista y compositora de larga trayectoria en el mundo de la música académica). Así que ya se imaginarán el poderoso sonido detrás de esta colección de canciones de Suzanne Vega.

En este, su cuarto álbum de estudio, aunque la vena folk y acústica está presente (especialmente en la estrujante canción “Bad Wisdom”), Suzie se lanza a la experimentación rítmica con dejos industriales (“99.9 F°”, “Rock in This Pocket”, “My Movie”), al new wave de avanzada (“Blood Makes Noise”, “Private Goes Public”), y conserva la fuerza de sus profundas baladas (“In Liverpool”, “Bad Wisdom”, “Song of Sand”) y el humor negro (“Fat Man & Dancing Girl”, “As Girls Go”, “When Heroes Go Down”).
Para redondear la potencia de todo este conjunto de sorprendentes características: la poesía de Suzie Vega y los temas que aborda con una sensibilidad extraordinaria. “Rock in This Pocket (Song of David)” es una visita a la parábola bíblica de David y Goliat con énfasis en el poder de la justicia que acompaña al débil frente al poderosos. “In Liverpool” se acerca al suicidio desde metáforas que provienen del Quasimodo de Víctor Hugo (“el jorobado en el cielo que toca las campanas durante la última media hora”). “Blood Sings” habla del abandono en que se pierde la gente (“¿Cómo fue esta vida única cayó tan lejos, tan rápido?”). La caída vuelve a aparecer en “Fat Man and Dancing Girl” y nuevamente en “Bad Wisdom”, fabulosa balada en tiempo de vals en la que la protagonista es una joven mujer que cae en un abismo empujada por la incomprensión de quien la rodea.
Los prejuicios de lo que hoy llamamos mansplaining (esa actitud arrogante del macho que pretende engatusar a la mujer con un discurso imparable y por lo general estúpido) están sarcásticamente ilustrados en “(If You Were) In My Movie”) y “As Girls Go”, y el dolor del aprendizaje en “As a Child”; el desencanto con respecto a los ideales caídos en “When Heroes Go Down”, así como una especie de premonición de lo que sería la crisis del saber en el siglo XXI con “Private Goes Public”.
Un disco extraordinario que, como decíamos al principio, trasciende los límites del pop en el que se le ha encasillado, con una poética poderosa y profunda y buena dosis de búsqueda musical. No se lo pierdan.

Lista de Temas:
1. Rock in This Pocket (Song of David)
2. Blood Makes Noise
3. In Liverpool
4. 99.9 F°
5. Blood Sings
6. Fat Man & Dancing Girl
7. (If You Were) In My Movie
8. As a Child
9. Bad Wisdom
10. When Heroes Go Down
11. As Girls Go
12. Song of Sand
13. Private Goes Public
Alineación:
- Suzanne Vega / voz, guitarra acústica (excepto en 2 y 6)
- Jerry Marotta / batería, percusiones (excepto en 5, 12 y 13)
- Bruce Thomas / bajo (excepto en 5, 6, 12 y 13)
- Richard Pleasance / guitarra eléctrica (1, 3, 10)
- David Hidalgo / guitarra eléctrica (excepto en 5, 6, 9, 10, 12 y 13)
- Mitchell Froom / teclados (excepto en 12), arreglo para cuerdas (12)
- Tchad Blake / guitarra eléctrica (3, 4, 6, 10)
- Michael Visceglia / bajo fretless (5)
- Marc Shulman / bazouki (5)
- Jerry Scheff / bajo (6, 12, 13)
- Greg Smith / saxo (8, 11)
- Richard Thompson / solo de guitarra (11)
- Sid Page / primer violín (12)
- Joel Derouin / segundo violín (12)
- Maria Newman / viola (12)
- Larry Corbett / cello (12)